Representantes de diversas comunidades mapuche emplazadas en el territorio Colico, en Carahue, llegaron hasta las oficinas de la Superintendencia regional del Medio Ambiente en Temuco para solicitar el cierre del vertedero municipal.
Son 200 familias las que acusan que el recinto no cumple con las condiciones de resguardo para la salud y el ambiente de los habitantes del lugar, por lo que exigen a las autoridades sea clausurado.
Humberto Pichingol, lonco de la comunidad Antonio Levio, expresó que el funcionamiento del recinto los afecta directamente en la calidad de vida.
Por su parte, Víctor Riquelme, integrante de la misma comunidad, afirmó que continuarán movilizados hasta lograr el cierre, además de estar a la espera que Contraloría investigue en qué condiciones está el lugar.
Desde la Superintendencia del Medio Ambiente, el jefe regional Luis Muñoz señaló que no tienen las facultades para ordenar la clausura, sin embargo, se comprometió a reunir los antecedentes para realizar una fiscalización en el lugar.
Hace algunos meses, las propias comunidades presentaron un oficio de fiscalización en la Contraloría regional y advierten que agotarán todas las instancias hasta que sus demandas sean atendidas.
