El canciller Alberto Van Klaveren respondió con dureza a los dichos del presidente venezolano Nicolás Maduro contra el mandatario electo José Antonio Kast, calificándolos como “lamentables” y restándoles cualquier peso político.
Consultado por las declaraciones del líder chavista, el ministro de Relaciones Exteriores fue categórico:
“La verdad, es muy lamentable, pero no nos puede sorprender. Realmente las opiniones del dictador de Venezuela no deberían sorprender a nadie”, dijo.
Van Klaveren resta peso político a dichos de Maduro sobre Kast
El canciller instó además a Maduro a “proteger a su propia población, a evitar las torturas que se cometen en el país y todas las violaciones de los derechos humanos”. Y descartó, además, el envío de una nota diplomática, recordando que Chile no mantiene relaciones con Caracas “por decisión que tomó Venezuela”.
Respecto a las propuestas que ha planteado Kast en materia internacional —como un corredor humanitario o una eventual salida legítima de Maduro— el canciller evitó entrar en el fondo. “No procede que yo comente las declaraciones del presidente electo. Por supuesto, merece todo mi respeto”, afirmó.
Cancillería sobre futuro gobierno de Kast
El presidente electo viajó a Argentina para reunirse con Javier Milei, y según Van Klaveren, la Cancillería brindó el apoyo protocolar habitual, con “facilidades como corresponde con cualquier presidente electo”, indicó, descartando cualquier incomodidad por gestiones paralelas. “Es natural, es normal y no es el primer presidente electo que viaja al extranjero. No representa ningún problema”.
En cuanto a una eventual colaboración futura con el próximo gobierno, el ministro aseguró que existe disposición al diálogo, aunque con cautela. “Tenemos la mejor disposición a colaborar como corresponde a cualquier cancillería y estamos disponibles para dialogar con los equipos que él designe”, señaló.
Eso sí, advirtió que iniciativas como un corredor humanitario requieren un análisis complejo. “Requiere la coordinación con nada menos que cuatro países y también con el país emisor de la emigración, como ha sido el caso de Venezuela. Todos sabemos que eso es un diálogo extremadamente difícil”, concluyó.