Si bien los parlamentarios Henry Leal y Flor Weisse reconocieron las “buenas intenciones” que tendría el arzobispo de Santiago, reiteraron su oposición a que en una eventual mesa por la paz sean invitadas algunas organizaciones como la CAM.
Los diputados UDI, Henry Leal y Flor Weisse, expresaron su “absoluto desacuerdo” con las recientes declaraciones del arzobispo de Santiago, Fernando Chomalí sobre la posibilidad de sentarse a dialogar con la CAM.
Estos dichos se dieron durante la jornada de este jueves tras ser consultado sobre la propuesta de la directora del INDH, Consuelo Contreras, de invitar a la Coordinadora Arauco-Malleco a una mesa por la paz en la Macrozona Sur.
Al respecto, el representante de la iglesia aseguró que “cerrarle la puerta a alguien que quiere dialogar, no me parece adecuado, porque las personas pueden cambiar“.
Si bien, los parlamentarios destacaron las “buenas intenciones” de parte del arzobispo, aseguraron que “sus pensamientos y oraciones debieran estar con las víctimas de la violencia rural y no con los victimarios”.
Antes de hablar con criminales es necesario escuchar la opinión de las víctimas
“Antes de abrirle la puerta al diálogo a los grupos criminales que operan en la Macrozona Sur (…) el arzobispo de Santiago debiera preguntar primero la opinión de las miles de víctimas del terrorismo que existen en nuestras regiones”, apuntaron los diputados UDI.
“Monseñor Chomali se ha equivocado de manera rotunda, porque jamás se debiera dialogar ni negociar con el terrorismo”, reiteraron. En este sentido, los representantes de la bancada UDI hicieron un llamado al arzobispo de Santiago a “aclarar” sus declaraciones.
“Queremos pensar que el Monseñor Chomali se equivocó al momento de expresar su idea, porque bajo ningún pretexto ni argumento podríamos avalar una propuesta como la que realizó la directora del INDH”, aseguraron.
Siguiendo la misma línea, los diputados Leal y Weisse indicaron que a este tipo de grupos se les tiene que perseguir con todo el rigor de la ley, y bajo ningún pretexto abrirles la puerta al diálogo. “Han sido precisamente ellos los causantes de la grave violencia que vivimos en el sur, y que incluso ha provocado la muerte de inocentes”, concluyeron.
