El arzobispo de Santiago se mostró abierto a la posibilidad de sentarse a dialogar con la CAM ante la violenta situación que se vive en la Macrozona Sur.

El arzobispo de Santiago, Fernando Chomalí, se refirió a la propuesta de la directora del Instituto Nacional de Derechos Humanos, Consuelo Contreras, de sentarse a dialogar con la Coordinadora Arauco Malleco para encontrar una solución a la situación en la Macrozona Sur.

Cabe destacar que, según El Mercurio, la representante del INDH dijo que “hay que hacer una suerte de tregua y hacer un alto en las acciones de violencia, pero hay que sentarlos a la mesa para poder resolver los problemas que tienen o que levantan, porque, si no, van a seguir marginalmente con los actos de violencia”.

Sin embargo, estos dichos no cayeron muy bien a la CAM, quienes respondieron que no existe posibilidad de diálogo mientras haya militarización de por medio.

Por otro lado, la oposición también demostró su descontento ante esta posibilidad, argumentando que no podrían dialogar con grupos terroristas.

“Cerrarle la puerta a alguien que quiere dialogar no me parece adecuado”

Mientras tanto, el representante de la iglesia, dejó clara su postura a la posibilidad de dialogar con la CAM según ADN, recalcando que “cerrarle la puerta a alguien que quiere dialogar no me parece adecuado, porque las personas pueden cambiar”.

También se refirió a la responsabilidad de actos violentos por parte de la CAM, señalando que está “absolutamente en contra de la violencia, venga de donde venga, siempre lo voy a estar, pero no podemos cerrar las puertas a un cambio“.

“Si ellos deponen las armas y quieren entrar en un diálogo yo no veo razón alguna para no hacerlo”, añadió.

Finalmente, conversó sobre la ayuda que le brindó a Héctor Llaitul en 2015 y de cómo nadie le dio trabajo:

“Yo le di trabajo y me cayeron las penas del infierno. Y yo decía, cómo no vamos a ayudar a una persona que el Estado le permite salir a trabajar, los jueces le permiten salir a trabajar, quién soy yo para negarle eso, porque tiene competencias, y trabajó en una residencia de personas en situación de calle”, señaló.