El expresidente Ricardo Lagos defendió su apoyo al candidato presidencial de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric, asegurando que la irrupción de José Antonio Kast se debió a los llamados a "incendiar Chile". "Esa extrema izquierda era la mejor propagandista para llevar votos al señor Kast", sostuvo.
En entrevista con El País de España, Ricardo Lagos Escobar detalló las razones para dar su apoyo sin condiciones al candidato presidencial Gabriel Boric. Respaldo, que a diferencia de la expresidenta Michelle Bachelet, se dio sin una conversación previa.
“Votaré por Boric porque mi historia está vinculada a un hecho central: ¿cómo usted hace para vivir en un país donde todos seamos iguales en dignidad de derechos efectivos? Hay expectativas a medida que los países van creciendo y esas expectativas deben irse satisfaciendo”, señaló.
En ese sentido, Lagos aseguró que a diferencia del Chile donde gobernó la Concertación, esta es una sociedad con otro tipo de demandas culturales, de derechos de reproducción y de las minorías.
Sin embargo, advirtió que lo importante es que “los cambios deben hacerse de una manera gradual”.
“El próximo Gobierno tiene que tener claridad y, por eso, no cuestiono que, después de la elección de primera vuelta, ambos candidatos procedieran con mucho cuidado a actualizar sus programas para correrse al centro”, opinó.
“Por lo tanto, las posiciones ultristas del que se iba de Naciones Unidas, que suprimía el Ministerio de la Mujer, se acabaron. Y por el otro lado, se dan cuenta que los números tienen que cerrar bien y saber exactamente lo que se tiene que prometer y ser un poquito más cuidadoso”, agregó.
Consultado por los cuestionamientos que recibió por haber apoyado a un candidato de una coalición como el Frente Amplio, que ha sido muy crítica de su administración, Lagos defendió su decisión asegurando estar “profundamente orgulloso de lo que he hecho”.
“Es una nueva generación que cree que el mundo nace con ellos. Y está bien, es propio de la juventud”, dijo.
“La extrema izquierda era la mejor propagandista para llevar votos al señor Kast”
Respecto al otro candidato presidencial, José Antonio Kast, Lagos apuntó al contexto del estallido social como una de las causas de su irrupción. Aunque, de todas maneras cuestionó duramente los planteamientos del abanderado del Frente Social Cristiano.
“¿Qué es lo que encarna Kast? El decir: “Yo impongo la autoridad como sea. ¿A balazos? A balazos, sí señor, no me va a temblar la mano”. Y yo creo que no: que la autoridad se impone por definiciones políticas, no a balazos”, dijo.
“Pero quienes le han hecho la campaña a Kast son las posiciones radicalizadas de la extrema izquierda. No deja de ser notable que termine siendo un boomerang estas posiciones tan revolucionarias y fundamentales, que han empujado a la ciudadanía a decir: “No, quiero que haya orden y respeto por la legalidad”.
“Mientras más llamados había a incendiar Chile, esa extrema izquierda era la mejor propagandista para llevar votos al señor Kast”, sentenció.
En esa línea, criticó su propuesta de salir de la ONU, sosteniendo que “nunca pensé que alguien en Chile diría: ‘Me voy de Naciones Unidas"”.
Pese a todo, Lagos evitó calificar de fascista a Kast. “No me gustan esas caricaturas. ¿Porque usted piensa distinto a mí, entonces es fascista? Eso es la antidemocracia. Esos descalificativos no me convencen”, afirmó.
Los problemas de Boric y el PC
Por último, ante un eventual triunfo de Gabriel Boric, el expresidente Lagos apuntó a que su principal problema será terminar con las ayudas estatales que entregó el Gobierno a propósito de la pandemia.
“El próximo Gobierno deberá hacer frente al retiro de las actuales ayudas extraordinarias, que impactan en los recursos del Estado de manera que no se pueden mantener en el tiempo, con la necesidad de crear los puestos de trabajo indispensables en los que el papel activo de la política económica cae en el Estado”.
“Si hacemos eso bien, no tendríamos problemas. Pero las cosas no ocurren de la noche a la mañana”, arguyó.
En relación al rol que tendrá el Partido Comunista en una eventual coalición de Gobierno, Lagos se mostró crítico de su línea política, que a su juicio “no es lo que uno entiende por un conjunto de principios democráticos”.
“Pasada esta elección, deberíamos hacer un esfuerzo en llegar a puntos de encuentro entre todos los chilenos. Es como se construyen los países. Con odio no se avanza mucho”, concluyó.