Una encuesta de la empresa Ipsos mostró que un 60% de los consultados está a favor de la acusación constitucional en contra del presidente Sebastián Piñera. Asimismo, el estudio muestra que la mayoría de los chilenos tiene confianza en que la nueva Constitución será representativa, pero desconfían sobre el cumplimiento de los plazos de redacción.

Hace algunas semanas un grupo de parlamentarios de oposición presentó una Acusación Constitucional en contra del presidente Piñera, tras la investigación periodística “Pandora Papers”, en donde se reveló la venta de la Minera Dominga en donde estuvo involucrada la empresa del mandatario.

Al respecto, la encuestadora Ipsos realizó un estudio donde además del juicio político a Piñera, consultó respecto de las percepciones a dos años desde el estallido social y el fin al toque de queda, por ejemplo.

Apoyo a la Acusación Constitucional contra Piñera

Respecto de la Acusación Constitucional, un 60% de los encuestados se mostró a favor, en especial los mayores de 30 años, versus el 18% que se manifiesta en contra. Además, el 63% de los encuestados considera que es muy importante que el Parlamento investigue la responsabilidad del Presidente en los hechos.

En caso de que avance la acusación contra Piñera, la mayoría de los encuestados cree que ganará Chile (37%) y la ciudadanía (22%), por sobre los candidatos presidenciales y partidos de oposición.

En relación a los candidatos presidenciales, las personas consultadas creen que la acusación favorecerá a Gabriel Boric (31%) y a Yasna Provoste (21%) y que el menos beneficiado será Sebastián Sichel (5%).

“En un momento de alta politización en el país producto tanto de las campañas presidenciales en despliegue como por las noticias diarias de la labor de la Convención Constitucional, los nuevos antecedentes sobre el caso Dominga a partir de los Pandera Papers han tenido un efecto importante en la opinión pública”, afirmó Alejandra Ojeda, directora de Estudios Públicos de Ipsos Chile.

“Más allá del género, edad o nivel socioeconómico, la ciudadanía está a favor de avanzar con la investigación por parte de parlamentarios y por una acusación constitucional”, agregó.

“Ya no hay tolerancia frente a la sospecha de falta probidad en autoridades y menos en el caso del Presidente”, sentenció Ojeda.

Incertidumbre, a dos años del estallido social

Asimismo, el estudio muestra que cuando los encuestados piensan en el estallido social un 47% evoca como emoción o sentimiento principal asociado a la incertidumbre, 37% evoca sensación de crisis y a un 28% frustración.

Y en cuanto a las consecuencias que trajo el estallido social para el país, las opiniones están dividas: Mientras que 41% señala que las consecuencias del estallido social fueron positivas (cifra que se eleva a 49% entre la juventud), un 45% cree que sus consecuencias fueron negativas.

“El estallido social se ha independizado como evento del proceso constituyente en la mente de las personas”, explica Ojeda.

Sin embargo, respecto del Acuerdo por la paz y nueva constitución mientras 41% cree que trajo consecuencias positivas para el país, sólo un 27% opina lo contrario. Y un 32% cree que aún no ha generado consecuencias.

Y en sintonía con la lectura del Acuerdo por la Paz y Nueva Constitución, respecto de una nueva constitución para Chile, 54% tiene confianza en que la nueva constitución será representativa y un 55% considera que será aprobada en el plebiscito de salida. Aunque sólo 44% cree que se podrán cumplir los plazos para la redacción de la constitución.

“Claramente hay un alta expectativa sobre el trabajo de la Convención Constitucional y una expectativa positiva sobre su resultado, se instala el acuerdo respecto que de que la nueva constitución será representativa y que finalmente se aprobará en el plebiscito de salida”, indica.

“Pero hay dudas sobre si se cumplirán los tiempos planificados. Al respecto, sería importante que la Convención Constitucional genere comunicaciones permanentes y claras sobre su avance por etapas para dar tranquilidad a la ciudadanía” asegura la directora de Estudios Públicos de Ipsos Chile.

Fin del toque de queda

El 1 de octubre pasado el Gobierno decidió ponerle fin al toque de queda después de 2 años desde el estallido y 1 año y 7 meses desde el primer caso de Covid-19 en el país.

¿Qué emociones despiertan en la gente, el fin del toque de queda? La emoción que se impone por sobre todas las consultadas es la tranquilidad (40%) muy por el sobre el temor (30%).

Sin embargo, esto se acompaña de incertidumbre (38%) y una opinión dividida entre la sensación de confianza (35%) y desconfianza (34%). Los niveles socioeconómicos altos se indican como más tranquilo, confiado y seguro frente a este nuevo escenario que los niveles medios y bajos.

57% de los encuestados asegura que ha mantenido y que pretende mantener los mismos horarios que antes del fin del toque de queda, y solo un 15% declara estar aprovechando la libertad de horario para salir o realizar actividades hasta tarde, cifra que se eleva a 25% entre las personas jóvenes.

La mayoría de las personas cree que el toque de queda se justificaba en el último año (66%), pero sólo 34% cree que debía continuar.

Pero en cuanto a la efectividad de esta medida como estrategia para controlar la pandemia, la mayoría de los encuestados opina que no fue efectiva (49%) versus el 32% se inclinó a catalogarla como medida efectiva.

Por último, en octubre 2021 y habiéndose anunciado el inicio de la tercera ola de contagio en el país, se observa la menor percepción de gravedad de la propagación del virus en Chile (39%), exceptuando la primera semana de pandemia en el país.

Y el Gobierno logra su mejor evaluación (30% de evaluación positiva) en su labor de enfrentar la crisis del Coronavirus desde el inicio de la pandemia.