La velocidad de contagios por coronavirus alcanzó recientemente el nivel más alto del que se tenga registro, de acuerdo al desglose de casos reportados desde desde el inicio de la pandemia que este miércoles cumple ya un año.

Según se desprende de las cifras, nuestro país tardó 107 días (del 2 de marzo 3 al 17 de junio de 2020) en llegar a los primeros 200 mil contagiados, lo que le significó que el 14 de junio se alcanzara el peak de nuevos casos (ver gráfico). Durante ese mismo periodo, en el que también se registró la denominada primera ola, Chile anotó en promedio 1.865 casos diarios.

Debieron pasar otros 68 días (del 18 de junio al 25 de agosto) para que nuestro país volviera a sobrepasar los 200 mil contagiados, con un promedio de 2.941 casos diarios.

El periodo menos complejo en lo que se refiere al avance de la pandemia se vivió entre el 26 de agosto al 27 de diciembre, cuando Chile volvió a superar el umbral de los 200 mil contagiados. Lo hizo en 123 días, con un promedio de 1.626 casos diarios.

Panorama totalmente opuesto es que el que concluyó el 22 de febrero recién pasado. Nuestro país -con un promedio de 3.571 casos diarios- tardó solamente 56 días en anotar otros 200 mil contagios, la velocidad más rápida de la que se tenga registro desde la llegada del virus a Chile, empujada -probablemente- por el relajo de las medidas sanitarias en las festividades de fin de año y el inicio de las vacaciones.

Vuelta a clases

Según argumenta Mauricio Canals, profesor titular de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile, las cifras demuestran que han habido dos procesos a lo largo de la epidemia: “El primero con una evolución bastante acelerada que se centró en la región Metropolitana, posteriormente hubo una mejoría, con bastante buen control, que se generó en el descenso de julio y agosto, hasta aproximadamente octubre y noviembre”.

Posteriormente, -agrega Canals- se “inició una aceleración importante”, relacionada primero con el periodo navideño y del Año Nuevo “en que la población se comenzó a movilizar de nuevo, a mezclar, a ir de compras, ir a los mall, etcétera”, y luego “con la mezcla de poblacional que se produjo con los permisos de vacaciones”. Esto último -detalla- explica la aceleración actual de los contagios.

A su juicio, esta situación “era algo esperado”, pues “el permiso de vacaciones necesariamente iba a producir un aumento en la movilidad y un aumento en la transmisión en todas las regiones, especialmente las que son centros vacacionales”.

“Hay críticas que se pueden hacer en el sentido de porqué abrir restoranes, etcétera. Tal vez ahí primaron motivos económicos y no sanitarios”, fustiga el académico.

-Hay regresos a clases, elecciones… ¿Qué se puede esperar ahora?

“Es súper dramático el problema porque evidentemente se ve que hay una intención de parte del Gobierno, de las autoridades, de intentar normalizar a toda costa el funcionamiento de Chile. Eso implica la apertura de centros comerciales, colegios, restoranes, etc. Además, existe el retorno de los estudiantes, lo que no sólo va a concentrar población en los recintos educacionales sino que aumenta la movilidad de la población por el flujo de personas que acceden a los centros de estudios, lo que naturalmente colapsa los medios de transporte con hacimiento importante”.

“La última semana los números se pusieron bastante malos, los números se echaron a perder. Habíamos tenido dos semanas en que la transmisión había disminuido un poco y el número de casos había elevado no significativamente, sin embargo, en las últimas semanas se produjo un importante aumento. Varios días sobre 4 mil”, advierte.

Velocidad podría aumentar aún más

Precisamente, si se mantiene el ritmo de 4 mil o más casos diarios, los próximos 200 mil contagiados se alcanzarán en 50 días o menos, algo que cobra especial relevancia pues el panorama en el corto plazo no es para nada alentador.

En efecto, Manuel Nájera, médico epidemiólogo y vicepresidente de la Sociedad Chilena de Epidemiología, advierte que no debemos esperar “un marzo muy auspicioso en el control de casos”.

Por el contrario, apunta que “probablemente lo que observemos ahora en marzo es el aumento de la movilidad reducida que vimos durante enero y febrero en algunas grandes regiones (…) y empiece a observarse un aumento de contagios”.

“El retorno de los niños, eso sin duda va a generar aumentos de casos porque estamos juntando más gente cuando antes no se juntaban. Eso produce más riesgo de contagios”, añade, por lo que el especialista espera que exista un endurecimiento de los protocolos, tal como ha ocurrido en otros países, donde se “ha demostrado que se puede lograr (bajar los riesgos) si se aplican bien”.

Asimismo, indica que se debe tener una “visión optimista” respecto de la vacunación: “Esperamos que impacte no en la cantidad de enfermos, pero sí de enfermos graves, que es lo que primero que le pedimos a la vacuna”.

Marzo 2020 vs 2021

Consultada Claudia Saavedra, presidenta de la Sociedad de Microbiología de Chile y académica de la Universidad Andrés Bello, explica que “estamos partiendo marzo 2021 en una condición totalmente distinta a la que partimos el año pasado”.

¿La razón? “Tenemos las UCI con 95% de ocupación de todo el país, lo que nos deja frente a la vuelta de vacaciones en una situación bastante compleja, donde el testeo va a tener un rol fundamental. Eso nos permitirá hacer la trazabilidad y poder así aislar a las personas contagiadas”, sostiene.

A la ocupación de camas, agrega que se han reportado “4 mil infectados diarios promedio, con un número de fallecidos que están entre los 90 y los 100 cada día”.

“No tenemos una situación muy cómoda frente a la apertura de los gimnasios, el transporte, los colegios”, reflexiona.

A un año del inicio de la pandemia en Chile, 20.684 personas han fallecido producto del virus, con confirmación vía PCR. Los contagios totales, en tanto, se alzan a los 832.512. El virus está lejos de retroceder.