El ministro de Relaciones Exteriores, Andrés Allamand, salió este sábado a defender públicamente la necesidad de aprobar el Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP11), asegurando que hay una campaña de desprestigio y enviando un mensaje directamente a la oposición, señalando que “votar en contra, es votar contra del legado de Bachelet”.

Allamand se quejó de los retrasos en la tramitación de la iniciativa. “El tratado se encuentra en el Senado hace casi dos años, ha sido votado y visto en las comisiones y la dilación en la aprobación está generando efectos negativos en el país. Está afectado a la recuperación económica, si el tratado estuviera aprobado, más de 3 mil productos estarían ingresando a los mercados del TPP11 con ventajas que hoy no tienen”, afirmó.

De acuerdo al ministro, “esto ha significado una merma en las exportaciones del orden de los 2 mil millones de dólares”.

Aseguró que sin el TPP11 “estamos dando una ventaja a naciones que son competidoras nuestras (…) cuando los chilenos no podemos llegar a esos mercados y sí lo hacen esos competidores, entonces se produce un hace un desplazamiento de nuestros productos que es difícil de recuperar”.

“El no suscribir y no ratificar el tratado afecta a lo que ha sido una de las estrategias de las últimas décadas, que es nuestra inserción en el Asía Pacífico”, recalcó.

A su juicio, “se produce una paradoja: mientras hay sectores en la política chilena que se resisten a suscribir el TPP1, resulta que China y el Reino Unido manifiestan su voluntad de incorporarse a esta asociación”.

Allamand destacó que “el TPP11 corresponde a una política de Estado y constituye uno de los legados más importantes del segundo gobierno de la presidenta (Michelle) Bachelet”.

“Cuando se suscribió el tratado, aquí en Santiago, la presidenta Bechelet señaló que constituía un hito en nuestra política exterior. Dijo que su gobierno había querido ampliar y profundizar nuestra extensa red de acuerdos comerciales en beneficio de nuestros compatriotas”.

Y fue explícito en enviar un mensaje a la oposición: “votar en contra de este tratado, es votar en contra de la presidenta Bachelet, es votar en contra de uno de los legados más importantes de la presidenta Bachelet. Esperamos que ese elemento de juicio sea considerado por los senadores de oposición”.

Campaña de “tergiversación”

El TPP11 ha sido objeto de numerosas críticas. El canciller fue detallando una serie de puntos, buscando rebatir las opiniones contrarias. A continuación, sus dichos:

“La campaña que se ha iniciado contra este tratado mezcla elementos de tergiversación y de equivocación. Se dice que el tratado impide que un futuro gobierno quisiera expropiar una empresa extranjera, eso es totalmente falso, las facultades para expropiar empresas se mantienen completamente inalterables”.

“Se dice que impide la dictación de normas ambientales o de materia de seguridad social o laborales, es igualmente falso. Todas las facultades regulatorias se mantienen intactas”.

“Algunos señalan que el tratado afectaría el dictar normas para obtener una rebaja en el precio de los medicamentos es igualmente falso. De hecho Nueva Zelanda, que integra el tratado, tiene un sistema con los medicamentos más bajos del mundo”.

“La aprobación es algo necesario, muy importante, no podemos seguir perdiendo oportunidades para el país. Los argumentos que se han esgrimido en contra del tratado han sido desvirtuados en la discusión técnica, parece ser una suerte de objetivo político más que técnico”.

“El TPP 11 bajo ninguna circunstancia obliga a ninguna modificación legal en Chile. Lo que dice el artículo 135 actual de la Constitución no es si no la reafirmación de un principio de la política exterior chilena, que es el cumplimiento de los tratados suscritos”, puntualizó, añadiendo que su ratificación “no incide en el proceso constitucional”.