Se perciben aires de cambio en la Unión Demócrata Independiente, o al menos así lo esperan los más de cinco mil militantes que votaron por Javier Macaya como próximo presidente de la colectividad.

Y es que la UDI necesita con urgencia recuperar el terreno perdido en los últimos años a manos de sus socios de Renovación Nacional, quienes fueron el partido con más congresistas electos en las Parlamentarias de 2017.

En RN los antiguos nombres como Alberto Espina y Carlos Larraín han quedado relegados a un segundo plano, y han surgido liderazgos como el de Mario Desbordes y Manuel José Ossandón con una línea más hacia el centro político.

Sin embargo, sus socios de la UDI no han visto un recambio importante en su cúpula y pese a la elección de Jacqueline Van Rysselberghe, aún rondan en el partido de calle Suecia las figuras de los “coroneles”, como Andrés Chadwick, Juan Antonio Coloma Correa y Pablo Longueira.

Este último incluso intentó volver a la política en una fallida postulación a timonel del gremialismo, sin embargo sus líos judiciales por el Caso SQM lo llevaron a declinar su candidatura a favor de Víctor Pérez.

Este último defendió la gestión de Jacqueline van Rysselberghe, asegurando que “haría todo de la misma manera”.

“Si me hubiera tocado dirigir el partido durante el periodo que le tocó a Van Rysselberghe, haría todo de la misma manera, porque ese era el contexto y circunstancias”, afirmó el exministro del Interior.

Fue el corolario de los denominados “coroneles” de la UDI. Esto, porque si bien tanto Coloma como Chadwick siguen activos, especialmente el aún senador por el Maule, en la interna del partido aseguran que en esta elección su rol fue prácticamente invisible.

ARCHIVO | Pablo Ovalle | Agencia UNO

Así las cosas, esta vez al parecer la “generación del recambio” logró un triunfo que le permitirá dar ese tan necesario recambio de nombres y de lineamientos, tal como lo esperan los militantes que votaron por Macaya.

Si bien en algún minuto el exdiputado Ernesto Silva logró convertirse en timonel de la tienda oficialista como parte de esta “generación del recambio”, su vinculación con el escándalo con Penta lo llevó a renunciar en marzo de 2015 sin poder completar su periodo, ni tampoco consolidando el nuevo aire.

Aunque esta vez en la lista se incluyó un nombre que tiene su arrastre propio, como el de la diputada María José Hoffmann, quien si bien en un minuto se pensó como para presidir la UDI, finalmente postuló como secretaria general.

No en vano es la actual jefa de bancada en la Cámara de Diputados, un cargo en donde ha logrado alinear a gran parte de sus colegas en votaciones importantes, dándose chance incluso de criticar públicamente al Gobierno.

Macaya, el moderado dialogante

Respecto a Macaya, lo cierto es que en la interna de la UDI reconocen que si bien ha defendido los principios de la derecha más conservadora, es una figura moderada que logra llegar a acuerdos, lo que evidentemente será muy útil pensando en el proceso constituyente.

Esto último, más allá de la relación que pueda construir con el gobierno de Sebastián Piñera, que en los próximos 14 meses deberá abandonar La Moneda. Por otro lado, es conocida la cercanía de Macaya con algunos ministros claves como Jaime Bellolio, Hernán Larraín y Lucas Palacios, con quienes podría establecer líneas directas.

El propio presidente electo del gremialismo adelantó que buscarán dar “contenido” a su relación con el Gobierno para enfrentar a la oposición.

“Nuestro sector tiene la capacidad de ponerle ‘play’ a su propia música, de no estar bailando al ritmo de la música que nos ponen los del frente. Dentro de toda la empatía que se tiene que tener hoy día con un país que está con nuevas preguntas, tenemos que ser capaces de encontrar esas nuevas respuestas también, con una voluntad más férrea de llegar a acuerdos”, señaló.

ARCHIVO | Pablo Ovalle | Agencia UNO

De esta forma, los principales desafíos serán las elecciones de los constitucionales y las Presidenciales de 2021, donde dos cartas muy fuertes se perfilan para convertirse en abanderados: Joaquín Lavín y Evelyn Matthei.

De todas maneras, hay otro nombre que ronda y con el que posiblemente tengan que sentarse a dialogar, como es José Antonio Kast, con quien deben definir la eventual incorporación del Partido Republicano en la lista para constitucionales.

Fair play

Al respecto, en conversación con BioBioChile, el senador Juan Antonio Coloma aseguró que “eso es parte de las decisiones de la coalición y yo soy bien partidario de tener una lista lo más integrada posible y eso obviamente no depende solamente de uno, sino que depende del esfuerzo de todos. Yo tengo esperanza de que podamos entre todos tener una lista unitaria”.

Junto con resaltar que fue un proceso eleccionario con “fair play”, sin mayores roces o conflictos, Coloma destaca que “aquí es un partido evidentemente con complementariedad de liderazgos, pero que sigue unido y eso es lo que ahora se ve y se percibe”.

Respecto de los desafíos que debe enfrentar la UDI tras la elección, el otrora “coronel” puntualizó en que “aquí la gracia es que todos se van sumando, yo vi gente que ha sido fundadora del partido apoyando a Javier Macaya y vi gente joven apoyando a Víctor Pérez”.

El propio Pérez destacó el “guante blanco” tras reconocer su derrota en las elecciones.

“Esto fue una campaña y una contienda con guante blanco, con mucha altura de miras, y creo que la UDI sin dudas va a salir fortalecida”, destacó.

“Estamos seguros que Javier Macaya va a liderar el partido en momentos muy difíciles”, aventuró.

Los desafíos para la UDI

“Aquí no se dio una lógica de un antes y un después, aquí la lógica es que los mismos principios tienen que buscar fórmulas siempre renovadas, particularmente en un escenario del próximo año que es tan prolífico en materia de elecciones”, detalló el senador Coloma.

“Yo creo que hay hartos desafíos, algunos tienen que ver con la próxima elección de convencionales constituyentes, está las elecciones de gobernadores regionales, alcaldes, concejales, ahí hay un desafío grande y después inmediatamente las primarias presidenciales”, sostuvo.

“Para nosotros mantener dos candidatos que tienen alto grado de posibilidades de ser exitosos, como Joaquín Lavín y Evelyn Matthei, también abre un espacio bien valioso en cómo lograr en conjunto y probablemente a través del sistema de primarias abiertas la búsqueda de la mejor alternativa para la elección presidencial”, dijo Coloma.

“En materia de desafíos, nos va a tocar un periodo muy intenso y por eso es capital tener ideas comunes”, concluyó.