El exministro del Interior, Jorge Burgos, se involucró en una disputa con el embajador de Argentina en Chile, Rafael Bielsa, quien fue canciller de su país hace algunos años y es hermano del entrenador de fútbol Marcelo Bielsa.

Ambos políticos se han enfrascado este martes en un disputa sobre la gestión del presidente argentino Alberto Fernández, tanto en su política económica, como el enfrentamiento de la pandemia del covid-19 y el cambio de jueces que investigaban causas de corrupción.

La disputa la inició el exdiputado de la Democracia Cristiana cuando publicó una columna en el diario La Tercera, donde criticó a Fernández, recordando su profesión de profesor universitaria, la que ha seguido ejerciendo desde la Presidencia.

“Profesor, menos Zoom dando recetas, mejore sus asesores internacionales, menos desgaste intentando artilugios para evitar que la justicia sancione a los corruptos, aunque corra riesgo su dupla gobernante. No vaya a ser cosa que termine pareciéndose al maestro del tango ‘Chorra’ profesor de cachiporras”, fueron las palabras de Burgos que molestaron a Bielsa.

El diplomático también respondió a través de una columna en el diario El Mercurio, publicada este martes, denominada “El Comediante Burgos”.

“El abogado Burgos afirma que en Argentina una enorme cantidad de cuestiones se hacen peor que en Chile, con un énfasis consanguíneo del ensañamiento. Luego de enumerar algunas, remata: “que nos sirva de lección ahora que se nos aproximan tanta e importantes definiciones para el futuro de nuestro país”. Y han tomado nota sus compatriotas, señor
Burgo”, dice el diplomático.

Bielsa también se molestó por la alusión a Cristina Fernández en la columa de Burgos y escribió: “Una alusión directa a Cristina Fernández, que sería intolerable si Burgos fuese un caballero. Me abstendré, por respeto a mí mismo, de recordarle la letra de la cueca ‘El Hocicón"”.

Ante esta situación, Burgos respondió con una carta a La Tercera, titulada “Ni Hocicón, ni poco caballero”.

“El embajador en Chile de la República Argentina contesta en la edición de ayer de El Mercurio una columna que el suscrito publicara en el diario de su dirección el sábado recién pasado. Lo primero es desearle una pronta y plena recuperación del contagio covid que lo afecta. Qué duda puede caber que el Embajador tiene el derecho, acaso la obligación, de contestar una columna crítica de la gestión que viene ejecutando Alberto Fernández, ni sorpresa ni molestia por este lado. El representante diplomático ha sido parte activa de los largos años que el Kichnerismo ha gobernado. Los resultados están a la vista, las estadísticas no mienten, la situación es dramática y no será fácil salir de allí con las políticas públicas en práctica. Ni hocicón, ni poco caballero, simplemente un habitante del barrio preocupado por el destino de una Nación a la que estimo como muchos en nuestro país, y que ha sido puesta por sus gobernantes en un difícil trance”.