Tras conocerse una presentación realizada por la Asociación de Fiscales (ANF) donde pidieron la renuncia de la directora ejecutiva del organismo, Francisca Werth, y donde además acusaron un exceso de carga en cuanto a causas que deben ser tramitadas por los fiscales, como también una falta de apoyo, desde el Ministerio Público el Consejo General de Fiscales —presidido por el fiscal nacional y los fiscales regionales— rechazaron “categóricamente y en todos sus puntos el petitorio entregado por la Asociación”.

Es así como señalan que “el Consejo General ha calificado como desconcertante que se requiera, entre otras exigencias, una carga de trabajo de menos de una causa al día por fiscal, en delitos tan graves como la violencia intrafamiliar o la violencia sexual y que, al mismo tiempo, se solicite apoyo adicional de un abogado asistente y un funcionario para cada fiscal”.

Según explican, esas peticiones demandan recursos que el Ministerio Público “no posee”, además de tacharlas de “absolutamente desproporcionadas e innecesarias”. En esa línea, sostienen que “el tono y el contenido del petitorio son, además de irrespetuosos, inapropiados e irresponsables”.

Sobre la petición de renuncia a la directora ejecutiva nacional, Francisca Werth, sostienen que dicha solicitud “es improcedente, inaceptable y carente de toda base jurídica”, argumentando que la Asociación no tiene prerrogativa alguna para formular una petición de esta naturaleza.

Añaden que como Consejo General rechazan “la falta de prudencia y juicio de realidad que encierra el petitorio de la Asociación, cuyo contenido no hace más que dejar en evidencia la falta de conexión de sus autores con la dura realidad que atraviesa el país”.

Finalmente, realizan un reconocimiento a aquellos fiscales y funcionarios del Ministerio Público que “han evidenciado permanentemente su compromiso con las víctimas y testigos, desde la ocurrencia del estallido social hasta la actual crisis sanitaria”, señalando que “ese es el verdadero espíritu”.