El Centro de Investigación Toxicológica de la Universidad Católica (Cituc) es un organismo que recibe diariamente alrededor de 100 llamadas por intoxicación con sustancias potencialmente peligrosas. Según los datos de sus reportes, dieron cuenta del aumento de los casos de intoxicación intencional por parte de adolescentes, donde la cifra se triplicó en los últimos 14 años.
Según la información del Cituc, de sus 33.647 reportes por intoxicación del año pasado, más de 31 mil fueron por consumo de medicamentos, donde 17.430 fueron accidentales, 10.660 intencionales y 5,557 por otras razones, consignó durante esta jornada El Mercurio.
La situación se agrava en el rango etario de adolescentes (entre 12 y 18 años), donde la cifra se triplicó desde 2004 al 2018, alcanzando 3.034 casos en el último año. En las emergencias registradas en este tiempo, los adultos son quienes mayores casos han presentado (7.120), seguido de los adultos mayores (223), la categoría de edad desconocida (147) y edad escolar (136).
Juan Carlos Ríos, director de la entidad afirmó que “cuando hablamos de tóxicos e intensos suicidas, el consumo de medicamentos se da en nueve de cada diez casos; entonces, claramente hay un acceso mayor a los fármacos en las casas de lo que puede haber a otras sustancias tóxicas”.
En esa misma línea, la psiquiatra de la Clínica Meds, Pilar del Río, explicó que “los niños que toman medicamentos no quieren morir, sino que quieren terminar con su dolor, con el sufrimiento. Pero los fármacos son de muy fácil acceso; incluso, en las farmacias hay muchos potencialmente letales que se pueden comprar sin receta”.
De acuerdo a los datos de los reportes por intoxicación a través de fármacos del Cituc de 2018, los medicamentos que más emergencias levantaron fueron el clonazepam (2.045), el paracetamol (1.195) y la quetiapina (1.144), informó el matutino.
Ante este escenario, se recomienda consumir los medicamentos con responsabilidad, donde Ríos destacó que “llama la atención lo que pasa con el paracetamol. Hay mucha automedicación, porque la gente cree que se puede tomar este fármaco para cualquier cosa“.
También, en el medio citado se recordó el llamado de los especialistas a guardar los medicamentos en lugares de difícil acceso para los niños.
A su vez, la psiquiatra del Río dio cuenta de que hay que poner atención si alguien “está más de dos semanas con síntomas de malestar emocional, como puede ser tristeza, aislamiento, cambios en los hábitos alimenticios, dejar de dormir, irritabilidad” y en ese aso acudir a un especialista.
Si llega a ocurrir una situación de intoxicación, se debe llamar a un fono de emergencia en caso de que la persona se encuentre respirando normalmente y no presente cambios de coloración en la piel. Por el contrario, si el afectado tiene convulsiones o cambios de color se le debe llevar a urgencias.
