Giorgio Jackson forma parte de la Comisión de Ética y Transparencia de la Cámara de Diputados que analiza posibles sanciones en contra de los legisladores Gabriel Boric y Maite Orsini, por la reunión que tuvieron con Ricardo Palma Salamanca en Francia.
Jackson, diputado de Revolución Democrática (RD) por el distrito 10, asumió el rol que le correspondía a su par Renato Garín, quien se inhabilitó de la instancia por una denuncia que hay en su contra por agresiones a un funcionario del congreso.
La mañana de este martes dicha Comisión, con la participación de Jackson, declaró admisible de forma unánime el recurso presentado por la bancada de diputados de la UDI el pasado 14 de noviembre, para que se investigue como se gestó la reunión de los parlamentarios con el exfrentista y se resuelvan eventuales sanciones.
Conocida es la amistad que han cultivado durante años Jackson y Boric, la que partió cuando ambos fueron líderes del movimiento estudiantil en 2011 y que luego continuó cuando llegaron hasta el Parlamento. Sin ir más lejos, durante su primer periodo en el Congreso (2014-2018), compartieron departamento en Valparaíso.
Además, por redes sociales los legisladores del Frente Amplio se han mostrado muy cercanos, incluso calificando por largo tiempo su amistad como un “bromance”, que proviene de la contracción de la palabra hermano (brother, en inglés) y romance.
Tras la declaración de admisibilidad en cuanto a la forma del recurso, ahora estará en las manos de Jackson –y de los otros 12 parlamentarios que integran la Comisión de Ética– resolver posibles sanciones en contra de su amigo Boric y la diputada Orsini.
