Durante este lunes continuó el juicio oral para Rafael Garay en el Segundo Tribunal Oral de Santiago, acusado de estafas reiteradas a 29 personas por un monto cercano a los 1.300 millones de pesos. En esta oportunidad compareció el imputado, quien reconoció sufrir alcoholismo y que intentó suicidarse.

La declaración del ingeniero se inició a las 09:20 horas, en la que reconoció haber engañado a algunas personas y que las utilidades de las inversiones eran ficticias, aclarando que su empresa Think & Co solo operaba en casos de asesorías y consultorías.

“Las utilidades eran ficticias, las cartolas que envié eran ficticias, tomé dinero de algunas personas y las entregué a otras”, aseguró el ingeniero comercial al ser interrogado por su abogado, Daniel Celis.

En ese contexto, narró cronológicamente los hechos desde el 2011, cuando conoció a los primeros cuatro clientes, entre ellos, el periodista Ivan Nuñez, quien habría confiado 20 millones de pesos para que se incrementara dicho capital.

En la instancia Garay aseguró que devolvió $24 millones, pero con montos sacados desde el depósito realizado por los otros tres clientes.

De acuerdo a su declaración, recibió 1.625 millones de pesos de las víctimas, pese a que el informe de la PDI establece un monto menor. Lo mismo ocurre respecto al daño total a los afectados, el cual Garay cifra en 1.351 millones de pesos, mientras la policía estima que sólo son 1.240 millones.

En tanto, el dinero reintegrado a las víctimas fue de 273 millones de pesos, aseguró.

Con todo ese dinero en su poder, Garay asegura que gastó 900 millones de pesos en vehículos: siete Mercedes-Benz, dos Jeep Gran Cherokee y un lujoso Jaguar. Naturalmente, a la hora de la venta los autos iban perdiendo su valor.

Asimismo, admitió que 279 millones de pesos los desembolsó en alcohol y vida nocturna.

Alcoholismo desatado

Junto con ello, reiteró que padecía alcoholismo desde la adolescencia, que sufría trastorno límite de personalidad no tratado y que intentó quitarse la vida inyectándose una importante dosis de insulina.

“Cuando hablo de mis problemas personales, no quiero decir que soy inimputable. Soy plenamente consciente de mis responsabilidades”, aseguró el penquista, ya que “hoy, a dos años de los hechos, puedo ver que en ese momento estaba ahogado, asfixiado, destruido”.

“La diferencia es total. Llevo 24 meses de abstinencia alcohólica. Soy agradecido del proceso. Recuperé a mi pareja, he visto a mi hijo crecer. Soy consciente de la enfermedad que tenía. Hoy tengo atención, apoyo psicológico, tratamiento psiquiátrico”, admitió.

Declararán más de 40 personas

Este proceso se inició el viernes, en el que el Ministerio Público pidió seis años de cárcel para Garay, quien dejó Chile hace dos años argumentando sufrir un cáncer para el cual necesitaba recibir tratamiento en el extranjero, pero terminó regresando tras ser detenido y extraditado desde Rumania.

Durante la primera jornada, el juez Raúl Díaz narró todas las causas iniciadas en contra del autodenominado economista por las personas que acusan haber sido defraudadas por el ingeniero comercial mientras éste dirigía la empresa de asesorías Think & Co.

Debido a que varias víctimas tenían problemas para entregar sus testimonios en persona, el tribunal aceptó que tres de ellas lo hagan a través de videoconferencia en alguna de las audiencias agendadas para los días 13, 24 y 26 de septiembre.