Desde la fundación Iguales acusaron al Gobierno de dejarse llevar por prejuicios en la Ley de Adopciones, puesto que dieron a conocer la intención de privilegiar a las familias conformadas por un padre y una madre.

La noche del martes, mediante un documentos de tres páginas, desde el Ministerio de Justicia explicaron que eliminarán el orden de prelación establecido hasta hoy para las personas que quieren adoptar, el que prioriza a las parejas chilenas casadas, seguidas por los matrimonios extranjeros, las solteras y las divorciadas o viudas que cumplan con los requisitos establecidos por la ley.

Sin embargo, la autoridad anunció que “una preferencia legal por adoptantes que le den una ambiente familiar con padre y madre”, lo que dejaría fuera a las familias constituidas por una pareja del mismo sexo.

Desde la fundación advirtieron que se estaría dificultando a los más de 9.000 niños, niñas y adolescentes que actualmente están al cuidado del Servicio Nacional de Menores (Sename) de poder optar a una familia que, pese a su orientación sexual, pueda otorgarle las mejores condiciones de vida.

“Establecer una preferencia legal de ciertas familias por su composición, y no por su idoneidad, es dar la espalda al interés superior del niño y privilegiar los prejuicios que van contra toda evidencia científica”, explicó Juan Enrique Pi, presidente ejecutivo de Iguales.

“Llamamos a los parlamentarios a aprobar una ley que, a diferencia del Gobierno, sí priorice el bienestar de los niños por sobre las ideologías”, sentenció.