En un primer encuentro, el Gobierno y el comité Ejecutivo de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) dieron inicio a la discusión por el próximo incremento del reajuste salarial, que regirá a partir del 1 de julio.

Las carteras de Trabajo y Hacienda encabezaron la reunión donde entregaron los tres aspectos relevantes, que a su juicio, debiesen plantearse en esta discusión.

Además de entablar un acuerdo en torno al reajuste del salario mínimo, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, propuso que el mecanismo de dicha negociación sea plurianual.

De esta manera, el jefe de finanzas públicas abordó la intención de negociar, siempre y cuando, el escenario se atenga a las condiciones que enfrente la economía. Misma opinión manifestó su par de Trabajo, Nicolás Monckeberg, quien señaló que la principal intención es demostrar las posibilidades de llegar a un acuerdo con los trabajadores.

La presidenta de la CUT, Barbara Figueroa, valoró el encuentro y los planteamientos del Ejecutivo. Tras la reunión, la dirigenta aclaró que la intención es reactivar un debate de política salarial que se dio en 2014, con el entonces ministro de Hacienda, Alberto Arenas.

Pese a no acordarse cifras, dentro del cronograma con que se enfrentará la discusión, desde la CUT apuntaron a las tareas prioritarias en la conformación de la política salarial. Mayor o menor guarismo, discusión sobre la brecha salarial, y si el ingreso responde a las familias con la superación de la pobreza.

La Central Unitaria de Trabajadores aseguró estar a la espera del informe que desarrolle el Gobierno, para enfrentar la próxima reunión el 11 de junio.