El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, afirmó que romper el principio de inviolabilidad "pone en peligro la normalidad de las relaciones internacionales", un día después de la irrupción de la policía ecuatoriana en la embajada de México.

El secretario general de la ONU, António Guterres, dijo este sábado sentirse “alarmado por la entrada a la fuerza” de agentes ecuatorianos el viernes en la Embajada de México en Quito, en una declaración emitida un día después de los hechos.

Guterres recordó que los edificios diplomáticos y su personal gozan “de un principio cardinal de inviolabilidad (que) debe ser respetado en todos los casos, de acuerdo con la legalidad internacional”.

La vulneración de este principio “pone en peligro la normalidad de las relaciones internacionales”, por lo que llamó tanto a Ecuador como a México a “resolver sus diferencias por medios pacíficos”.

El asalto a la Embajada de México en Quito tuvo como fin detener al exvicepresidente Jorge Glas, allí asilado, provocando que México rompiera de inmediato las relaciones diplomáticas con Ecuador, y que este sábado Nicaragua hiciera lo propio.

El Departamento de Estado de EE.UU. también condenó el asalto a la embajada y lo catalogó como “una violación a la Convención de Viena”, que rige las relaciones diplomáticas, y exhortó a los dos aliados de Washington a “resolver sus diferencias de acuerdo con las normas internacionales”.

También condenaron el hecho los Gobiernos de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Cuba, Honduras, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela.