Mia Schem, la joven israelí con ascendencia chilena que permaneció secuestrada por Hamás, calificó su cautiverio como "un infierno".

La tatuadora que fue tomada prisionera por la agrupación islámica mientras participaba en la fiesta de música Supernova el 7 de octubre, dio una entrevista a Canal 13 de Israel.

En un adelanto dado a conocer por la estación, Schem indicó que experimentó un “infierno”.

“Para mí era importante reflexionar la situación real de las personas que viven en Gaza. Quiénes son realmente y lo que pasé allí”, mencionó, según recoge The Times of Israel.

“Es importante para mí que entiendan que pasé por el Holocausto y que todos los que están allí son terroristas”, sostuvo en el video compartido por la señal. La entrevista completa será emitida este jueves en el horario prime de Israel.

Según su relato, en un momento se dio cuenta que estaba retenida en una casa en donde toda la familia estaba “al servicio de Hamas”.

“Me empecé a preguntar por qué estaba secuestrada en un hogar familiar, por qué hay niños”, puntualizó.

La joven de origen chileno fue liberada el pasado 30 de noviembre en medio “de un multitud palestino gritando en su contra. Su rostro dice todo”, según indicó en aquella oportunidad el embajador de Israel en Chile, Gil Artzyeli.

La desaparición de Schem había sido denunciada por la Comunidad Judía de Chile una semana después de los ataques de la agrupación islámica en Israel.

Mia es nieta de Zeev Scharf, chileno de 83 años quien junto a su familia buscó desesperadamente a la mujer. Pese a su ascendencia, la joven es israelí ya que nació en el centro de dicho país.

Schem estaba realizando un curso para convertirse en tatuadora profesional en los días en que comenzó la escalada del conflicto entre Israel y Hamás.