El presidente ucraniano facilitó los primeros datos de soldados muertos en combate desde que comenzó la ofensiva de las tropas del Kremlin. Además, manifestó su deseo de celebrar varias conferencias de paz, a las que no descarta invitar a Rusia.

Volodimir Zelenski reveló este domingo que 31.000 soldados ucranianos han muerto en combate en los dos primeros años de guerra con Rusia, una cifra muy baja en comparación con la que manejan diversas organizaciones internacionales.

“Ni 300.000, ni 150.000 como dicen Putin y su círculo de mentirosos”, declaró.

Además, señaló que la victoria de Ucrania sobre Rusia “depende” del apoyo de Occidente y dijo estar “seguro” de que Estados Unidos aprobará el paquete de ayuda militar actualmente bloqueado.

Cabe resaltar que las estimaciones de Estados Unidos filtradas el año pasado elevaban a 70.000 el número de soldados ucranianos muertos, más del doble de la cifra aportada por Zelenski.

“31.000 soldados ucranianos han muerto en esta guerra” dijo el mandatario ucraniano en una rueda de prensa en Kiev, celebrada este domingo con motivo del segundo aniversario de la invasión, ofreciendo así el primer balance oficial de las pérdidas militares de Ucrania.

Allí explicó que el número no incluye a militares heridos ni desaparecidos y rechazó las estimaciones que sitúan el número de fallecidos en 300.000.

En su intervención, el presidente ucraniano no quiso dar el número de soldados ucranianos heridos “para no ayudar a Rusia a conocer el número de ucranianos” que han ido al frente.

Soldados ucranianos a la espera de armas occidentales

Zelenski, en la misma rueda de prensa, afirmó que la victoria de su país sobre Rusia “depende” del apoyo de Occidente.

“Que Ucrania pierda, que sea muy difícil para nosotros y que haya un gran número de bajas depende de ustedes, de nuestros socios, del mundo occidental”, subrayó.

“Si somos fuertes, con armas, no perderemos esta guerra”, sostuvo.

En ese sentido, Zelenski se mostró optimista sobre la aprobación de un nuevo paquete de ayuda estadounidense de 60.000 millones de dólares, actualmente bloqueado en el Congreso en Washington por los representantes republicanos.

“Estoy seguro de que -la votación en el Congreso estadounidense- será positiva”, añadió.

Este bloqueo se produce en medio de crecientes temores de que las elecciones estadounidenses de noviembre y la postura de Donald Trump sobre la intervención en el extranjero puedan hacer o deshacer a Ucrania.

Pero Zelensky también apuntó a la UE, afirmando que Ucrania ha recibido sólo el 30 por ciento del millón de proyectiles de artillería prometidos por Bruselas.

El ministro de Defensa de la exrepública soviética lamentó por su parte que la mitad de las armas occidentales prometidas fueron entregadas con retraso.

“Una promesa no constituye una entrega”, criticó Rustem Umerov, y agregó que “un 50% de los compromisos no se cumplen a tiempo”.

Los retrasos, según Umerov, colocan a Ucrania en una mayor desventaja en la guerra contra Rusia ya que implica “pérdidas humanas y de territorio”.

Negociación imposible

Zelensky también ofreció su visión sobre unas eventuales conversaciones de paz con Moscú que posibilitaran una salida negociada a la guerra, una vía que se exploró sin éxito hace más de un año y medio en Estambul.

“¿Es posible hablar con una persona sorda? ¿Es posible hablar con una persona que mata a sus oponentes?”, se preguntó Zelenski.

El líder ucraniano insistió en su Fórmula de Paz, un documento que exige, entre otras cosas, la retirada de las tropas rusas de todo el territorio ucraniano, como único marco de negociación posible.

“Le ofreceremos una forma (a Putin) de aceptar que ha perdido la guerra, y que fue un gran error”, dijo Zelenski, que espera celebrar esta primavera en Suiza una cumbre internacional para que el mayor número posible de países dé su apoyo a su Fórmula de Paz.

Una vez recabado el apoyo de estos países, explicó que el documento se le presentará a Putin como se hizo con el acuerdo del grano auspiciado por Turquía y Naciones Unidas.