El jefe del Consejo Europeo, Charles Michel, urgió este domingo a los 27 mandatarios europeos a llegar a un acuerdo sobre su plan de recuperación, al tiempo que sugirió una nueva distribución de los fondos para convencer a los países más reticentes.

Michel, según una fuente conocedora de las discusiones, expresó a los 27 su deseo de que los europeos consigan llegar a “un acuerdo y que los diarios europeos titulen mañana [lunes] sobre el hecho de que la Unión Europea logró una misión imposible”.

Para salir de la mayor recesión de su historia, la UE debate un plan de 750.000 millones de euros (840.000 millones de dólares) que la Comisión Europea tomaría prestados en los mercados en nombre de los 27, un hito en el proyecto europeo.

Pero los detalles del plan, que beneficia a los países del sur, no logran convencer a los “frugales” adeptos del rigor fiscal —Países Bajos, Austria, Suecia y Dinamarca—, que reclaman un importe menor y menos subvenciones.

Discusión

El sábado, en el segundo día de cumbre, Michel propuso rebajar las subvenciones del medio billón de euros inicial a los 450.000 millones y, este domingo, habría sugerido una nueva rebaja hasta los 400.000 millones. El resto del fondo serían préstamos.

Sin embargo, los dirigentes de los países frugales no estarían dispuestos a ir más allá de los 350.000 millones de euros en subvenciones y reclaman, en contrapartida, una reducción mayor en su contribución al presupuesto de la UE, según varias fuentes.

En su discurso durante la cena de trabajo, Michel enumeró los cambios que realizó en plan desde el inicio de las negociaciones para tratar de convencer a estos países, como en el método del reparto de fondos o las condiciones para controlar su uso.