Podemos, la formación de izquierda radical aliada del gobierno español, reclamó este lunes al ejecutivo de Pedro Sánchez que deje de vender armas a Arabia Saudí después del asesinato del periodista Jamal Khashoggi.

En septiembre, el gobierno español recibió duras críticas por decidir mantener la entrega de 400 bombas de precisión a la monarquía árabe tras haberlo puesto en duda días antes a raíz de los bombardeos sobre Yeme de la coalición liderada por Riad que mataron a decenas de niños.

“Lo que llevamos tanto tiempo diciendo desde Unidos Podemos ahora lo dice también Alemania: los países de la UE deben dejar de vender armas al régimen saudí”, escribió en Twitter el dirigente de Podemos, Pablo Iglesias.

El miércoles, durante una sesión de preguntas al gobierno en el Congreso, “le exigiré una vez más al presidente del Gobierno que nuestro país cumpla con este mandato ético y democrático”, añadió.

La muerte de Jamal Khashoggi en el consulado saudí de Estambul suscitó en varios países un debate sobre la necesidad o no de revisar sus relaciones con Riad.

El domingo, la canciller alemana Angela Merkel advirtió que Berlín no autorizará la exportación de armas hacia el país árabe. Y el primer ministro canadiense Justin Trudeau afirmó que no descartaba que Canadá anule un importante contrato armamentístico con Riad.

En septiembre, Pedro Sánchez, cuyo ejecutivo depende especialmente del apoyo de Podemos en el Congreso, justificó el cambio de opinión del gobierno en la entrega de las 400 bombas por la necesidad de conservar las buenas relaciones con la monarquía del Golfo, su quinto comprador de armas.

En el plano comercial, la anulación ponía en peligro un contrato todavía más importante: el encargo de cinco navíos de guerra por 1.800 millones de euros que debe construir el astillero naval público Navantia y aseguraba numerosos empleos en Andalucía, un bastión socialista.