Entre las víctimas fatales hay 10 civiles, incluidos cinco niños. El total de heridos asciende a 440. Rusia desmintió denuncias de “limpieza ética” en Nagorno Karabaj.

Al menos 200 personas murieron y 400 resultaron heridas en la operación militar que lanzó Azerbaiyán en el enclave de Nagorno Karabaj, según un nuevo balance proporcionado este miércoles por los separatistas armenios.

Según informó en la red social X (Twitter) Gegham Stepanian, defensor del pueblo karabají, entre los muertos figuran 10 civiles, de ellos cinco niños.

Además otros 40 civiles, entre ellos 13 niños, resultaron heridos por los ataques de artillería, de drones y bombardeos aéreos lanzados por las fuerzas azerbaiyanas.

El Gobierno de ese país solo ha reconocido dos civiles muertos durante lo que llama “operación antiterrorista”, y un número indeterminado de soldados abatidos.

Anahit Manassian, un funcionario armenio a cargo de la protección de los derechos humanos, dijo que el sistema de salud estaba “paralizado” en el enclave, lo que impide que los residentes reciban “primeros auxilios”.

“Los derechos fundamentales de las personas son ampliamente violados”, agregó, acusando a Azerbaiyán de una “política genocida”.

“No hay motivos para hablar de limpieza étnica”

Rusia, que opera como garante de la paz entre Armenia y Azerbaiyán, desmintió las denuncias armenias de “limpieza étnica” de parte de las fuerzas azerbaiyanas.

“Por ahora no hay motivos para hablar de limpieza étnica”, dijo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov en declaraciones a la televisión pública rusa.

En tanto, miles de karabajíes se encuentran en el aeropuerto de la capital del enclave, Stepanakert, con el objetivo de ser evacuados.

Las autoridades de la autoproclamada república de Nagorno Karabaj anunciaron al mediodía del miércoles un cese inmediato de las hostilidades y capitularon ante Bakú, que logró tomar en menos de 24 horas casi un centenar de las posiciones enemigas.

Ambos bandos celebrarán este jueves negociaciones para abordar la integración de la región en Azerbaiyán y las garantías de seguridad para los karabajíes.