El activista hongkonés Joshua Wong y otros tres compañeros fueron condenados hoy por su participación, el pasado año, en la vigilia conmemorativa de la masacre de Tiananmen, cuya celebración no se autorizó en 2020 por primera vez en 30 años.

El juez Stanley Chan pospuso hasta el próximo 6 de mayo el anuncio de la sentencia de los cuatro jóvenes activistas (entre los que se encuentran también Lester Shum, Tiffany Yuen y Jannell Leung), que se declararon culpables de haber participado a sabiendas de la prohibición y se enfrentan a una pena de hasta cinco años de cárcel.

La condena se produce tres días después de que las autoridades hongkonesas anunciaran que no autorizarán la celebración de la vigilia este año debido a los riesgos derivados de la pandemia de covid-19, mismo motivo que el esgrimido el pasado año.

La vigilia de Hong Kong, ciudad que en 1989 acogió a un gran número de manifestantes que huyeron de la represión en la China continental, es la mayor conmemoración de la masacre del mundo, y desde 1990 se ha celebrado en el céntrico Parque Victoria cada 4 de junio.

Aunque el pasado año no había sido autorizada, decenas de miles de hongkoneses participaron en ella.

En agosto de 2020, dos meses después de la concentración, 24 activistas (entre ellos, los cuatro condenados hoy, el magnate hongkonés de la prensa Jimmy Lai, el veterano activista “Pelolargo” Leung Kwok-hung, y el vicepresidente de la Confederación de Sindicatos de Hong Kong Lee Cheuk-yan), fueron acusados de haber participado.

Durante la vista anterior, los cuatro y el exdiputado Eddie Chu aseguraron que se declararían culpables. El tribunal los procesó de manera separada a los otros 19 acusados, que no se espera que se declaren culpables.

Sin embargo, hoy el abogado de Chu indicó al juez que su cliente no se había decidido respecto a su declaración de culpabilidad, por lo que está previsto que Chu se presente ante la justicia el próximo 11 de junio con los otros 19 acusados.

A la conclusión de la vista, antes de salir del banquillo, Wong, que cumple dos condenas que suman 17 meses y medio de prisión por actividades relacionadas con su activismo político, gritó: “¡Aunque el mundo cambie, nosotros no cambiaremos!”.