No se han reportado víctimas o daños materiales, según informó este sábado el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) de El Salvador.

El volcán Chaparrastique, situado al oriente de El Salvador y que hizo erupción en diciembre de 2013, continúa expulsando gases y ceniza, sin que se reporten víctimas o daños materiales, según informó este sábado el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN).

Según un informe “especial” del MARN, el total de explosiones registradas desde el pasado 15 de noviembre es de 146, con un promedio diario de 13, y la altura promedio que alcanzas las explosiones rondan los 500 metros.

Las explosiones de mayor altura, aproximada de 1.100 metros, se registraron los días 18 y 19 de noviembre, de acuerdo con el reporte.

De acuerdo con los registros históricos, indica el informe, el volcán -también conocido como San Miguel- se caracteriza por tener este tipo de actividad, que se clasifica como “estromboliana” y se caracteriza por explosiones, generalmente poco violentas, acompañadas de mezclas calientes de gases, cenizas y fragmentos de roca.

De hecho, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) mantiene un monitoreo constante que es posible seguir a través de Youtube.

La Dirección de Protección Civil, en tanto, emitió el pasado 16 de noviembre una advertencia para dos departamentos del oriente del país por la actividad presentada por el volcán.

Protección Civil apuntó que, desde la erupción del volcán Chaparrastique en diciembre de 2013, “se ha mantenido en permanente actividad y en las últimas horas se han registrado leves explosiones, emanaciones de gases y vapor de agua”.

La institución advirtió que la actividad que presenta actualmente podría generar “leves molestias a la salud de los pobladores por gases emanados, interrupción y suspensiones momentáneas en la movilidad de tránsito vehicular y circulación de peatones”.

El Chaparrastique se ubica a unos 2.130 metros de altura sobre el nivel del mar y su última erupción, antes de la de 2013, fue en 1976, según datos del Ministerio de Medio Ambiente, que mantiene una vigilancia permanente de unos ocho volcanes activos.