A una semana de las elecciones presidenciales, el profesor y sindicalista de izquierda Pedro Castillo y la derechista Keiko Fujimori se encontraron este domingo en un esperado debate, que se ha dado cuando dos encuestas le dan a Castillo una ventaja de solamente dos puntos. Hay cerca de 20% de indecisos.

Castillo, un maestro rural, estuvo más calmado y sereno. Keiko más a la ofensiva. Debatieron sobre la pandemia, economía, educación, corrupción y derechos humanos. Hubo poca profundidad y faltaron propuestas de políticas públicas.

“Vengo con las manos limpias”, dijo Castillo, un golpe a su rival, procesada por corrupción. Luego la llamó “jefa de una red criminal”, en referencia al proceso judicial en su contra por lavado de dinero y organización criminal por el financiamiento oculto de sus campañas electorales de 2011 y 2016.

Asimismo, Castillo aseguró que Keiko “es sinónimo de fujimorismo” y dijo que debería pedir perdón a las miles de mujeres pobres que fueron sometidas a esterilizaciones forzadas durante el gobierno de su padre, el expresidente Alberto Fujimori (1990-2000).

Por su parte, Keiko acusó a Castillo de promover la lucha de clases por sus cuestionamientos a las inequidades que marcan al país y de querer instaurar una dictadura comunista, lo que éste ha rechazado.

La candidata derechista mostró una piedra al acusar a su rival de promover la violencia en la campaña electoral y replicó que en el caso de las esterilizaciones no hubo una “política de Estado”.

Unas 270.000 peruanas pobres, muchas de ellas indígenas que no dominaban el español, fueron sometidas a cirugías de ligadura de las trompas de Falopio, como parte del Programa Nacional de Salud Reproductiva y Planificación Familiar que se llevó a cabo en los últimos cuatro años de Alberto Fujimori en el poder.

La causa, iniciada hace más de dos décadas y reabierta recientemente, tiene a 2.074 víctimas demandantes y entre los inculpados está el expresidente, tres exministros de Salud y otros exfuncionarios.

“Respetamos la propiedad privada”

Castillo prometió impulsar la creación de un millón de empleos en un año y negó que pretenda confiscar los fondos de pensiones de los trabajadores, prohibir las importaciones o impedir la inversión extranjera, como afirman sus críticos.

“Nosotros no vamos a quitarle sus ahorros a la gente que trabaja, respetaremos la propiedad privada […]. Los trabajadores son dueños de sus ahorros”, manifestó.

“Bienvenida la inversión privada, pero con reglas claras”, agregó.

Keiko, quien cuenta con el apoyo del sector empresarial, anunció “créditos para pequeños empresarios” y dijo que si llega al gobierno declarará en emergencia el sector turismo, el más golpeado por la pandemia en Perú.

Ninguno de los candidatos sacó una clara ventaja al término del debate.

Castillo supera en intención de voto a Fujimori para el balotaje presidencial del próximo 6 de junio en Perú, según un sondeo difundido el domingo.

Castillo el 42% de la intención de voto, mientras recibe un 40% de las preferencias, señala la encuesta de Ipsos publicada por el diario El Comercio, a una semana del balotaje.

Un 10% votaría en blanco o nulo y un 8% no precisó su opción electoral en la consulta, indicó el sondeo, el cuarto que realiza Ipsos desde la primera vuelta del 11 de abril.

Castillo subió dos puntos porcentuales y Fujimori también lo hizo en tres puntos en comparación a la encuesta realizada el 16 de mayo.