Un taxista chileno de 47 años pide al estado de Argentina un resarcimiento de un millón de dólares tras ser detenido durante 17 días por error en marzo pasado en la provincia de Neuquén.

César Rodríguez Carrillo viajaba desde Zapala (en Argentina) a Temuco, cuando el 22 de marzo fue arrestado en el paso internacional Pino Hachado, tras ser acusado de transportar cocaína líquida en 11 envases de champú.

Rodríguez trató de explicar a los agentes fronterizos que sólo se trataba de champú, que al ser mucho más barato en Argentina que en Chile, se suele comprar en grandes volúmenes. Pero los oficiales -apoyados según ellos- en el peritaje realizado por un perro antinarcóticos, lo detuvieron.

El chileno asegura que el animal sólo olfateó los productos y que no hizo ninguna otra reacción, consigna diario Clarín de Argentina.

Los peritajes posteriores demostraron que en realidad no se trataba de cocaína líquida, sino que la versión de Rodríguez era la correcta y que realmente era champú.

El hombre llevaba los champús a un spa en Temuco, quienes habían adquirido este producto a través de una subasta en Mercado Libre y contrataron al taxista que les trajera la encomienda.

Una vez que se comprobó que sólo era champú, la jueza María Silvina Domínguez liberó a Rodríguez, quien desde entonces con su abogado ha ido en dos ocasiones a Buenos Aires para hablar con el Ministerio de Seguridad de la Nación en busca de una indemnización

“Les pedí un millón de dólares, pero me dijeron que no porque era ‘mucho’. Hasta el momento no me hicieron ninguna contrapropuesta”, cuenta el chileno.

Rodríguez agrega que cuando estaba detenido, Carabineros de Chile revisaron su casa en Temuco en busca de drogas y afirmó que tenía el teléfono intervenido.

La petición del chileno de un millón de dólares al estado trasandino se basa en que él prestaba servicios a una empresa de remisería, para lo cual contaba con tres automóviles Hyundai Accent RB, los que adquirió a través de créditos.

Pero a causa de este episodio, la empresa de remisería dio por terminado los contratos de trabajo, por lo que ahora tiene una de duda en torno a los 17 millones de pesos chilenos.