Una emotiva postal se vivió el fin de semana en la despedida de Juanmi Callejón del Bolívar, en Bolivia.

Resulta que el hermano de José María Callejón, del Napoli, jugó su último partido en el cuadro boliviano, donde se hizo ídolo.

Sin embargo, en medio de esta situación, un niño se le acercó y le rogó de rodillas que no se fuea del equipo.

El español no pudo contener las lágrimas y rompió en llanto junto al pequeño.

Al final, Callejón se sacó su camiseta y se la regaló al menor, profundamente emocionado.