Tanto quien vende como quien compra a través de -por ejemplo- plataformas informales o redes sociales, corre el riesgo de ser asaltado al momento de concretar una cita para cerrar el supuesto negocio. En la RM ocurrió un caso: una mujer se juntó con una desconocida para venderle un perro, pero todo terminó en un asalto e intimidación con armas.

Tanto las policías como la Cámara Nacional de Comercio (CNC) han alertado de los riesgos a los cuales se exponen las personas al comprar productos o adquirir servicios en la informalidad.

El no derecho a garantías, el peligro de ser saltados (tanto quien vende como quien compra), o la exposición de la salud al comprar sin los estándares de la industria son parte de esos riesgos.

De acuerdo a cifras del sector, de cada $100 gastados de forma digital en plataformas chilenas, $11 fueron a compras informales. Para el caso de canales extranjeros, la situación es de $18 de cada $100.

En este contexto, una artimaña que reveló BioBioChile el año pasado fue la técnica de la “llave secreta”, relacionada con el robo de vehículos y que los delincuentes aplican en un contexto de trato entre particulares, generalmente luego de publicar por Internet un aviso de venta de un auto.

La plataforma Marketplace de Facebook es, por ejemplo, una de las preferidas de los estafadores. Por eso, a la hora de realizar compras en línea, es esencial estar alerta y seguir medidas preventivas para evitar caer en engaños.

La venta de un perro que terminó en asalto

El Poder Judicial Poder Judicial informó en la presente jornada la resolución de un caso también ligado a la informalidad en la compra-venta; que dejó en evidencia los peligros de reunirse con desconocidos que prometen hacer el pago al momento de concertar una cita con quien vende.

En detalle, el Segundo Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Santiago condenó a Noemí Marisol Troncoso Castro a la pena de cumplimiento efectivo de 5 años y un día de presidio, en calidad de coautora del delito consumado de robo con intimidación.

¿Qué ocurrió? En febrero del año pasado, la mujer llegó hasta un lugar público de la comuna de Conchalí para juntarse con otra mujer, a la cual compraría un perro de raza chihuahua.

La vendedora acudió al lugar de la cita con su pareja y portando al perro, que se suponía iba a vender.

Al llegar al lugar la compradora -Noemí Marisol Troncoso Castro- tomó al perro en sus brazos en brazos, a la vez que simulaba con teléfono efectuar la trasferencia del valor de venta acordado.

Sin embargo, la mujer nunca pretendió pagar por el perro: tenía todo arreglado para que en ese momento se acercaran hasta el lugar dos hombres con lo que había planeado asaltar a la vendedora y su acompañante.

Los intimidaron con un arma de fuego y un arma blanca, además, reventaron uno de los neumáticos del auto en el que se movilizaban los vendedores del cachorro, para luego quitarles las llaves.

Y en ese intertanto, la ahora condenada escapó con el perro.

Por todo, el Tribunal determinó para ésta una pena de cumplimiento efectivo de 5 años y un día de presidio, en calidad de coautora del delito consumado de robo con intimidación.

“(…) Se le aplicó, además, las accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos y la inhabilitación absoluta para profesiones titulares durante el tiempo de la condena”, precisó el fallo.

También se dispuso que se le proceda a la toma de muestras biológicas “para determinar su huella genética” e incorporarla así en el registro nacional de ADN de condenados.

Cómo evitar caer en engaños al comprar por internet

-Es importante verificar la autenticidad de las comunicaciones. Esto significa no proporcionar datos sensibles a través de correos electrónicos o mensajes sospechosos; y siempre confirmar la legitimidad en los canales oficiales de la compañía.

-Validar la identidad del vendedor/comprador es esencial. Para compradores, revisar la reputación del vendedor a través de calificaciones de compradores reales. Para vendedores, confirmar la identidad del comprador y asegurarse de contar con los datos necesarios.

-Evitar conductas riesgosas. No realizar transacciones fuera de la plataforma principal, desconfiar de ofertas demasiado buenas para ser verdad y no pagar por adelantado para acceder a ofertas o trabajos contribuye a prevenir estafas.

-Mantenerse escéptico y utilizar medidas de seguridad puede marcar la diferencia a la hora de protegerse contra posibles estafas al realizar compras en línea.