Según Colin Langan, importante analista de Tesla perteneciente a Wells Fargo, el crecimiento del volumen de ventas del fabricante de vehículos eléctricos será nulo este año. Y en 2025, será aún peor: los volúmenes caerán.

Tesla Inc. ya no es una acción de crecimiento candente. Su director ejecutivo, Elon Musk, ya lo ha dicho.

Pero incluso con ese nuevo estándar —y la rápida caída de las proyecciones de crecimiento en Wall Street—, la sombría predicción de ventas realizada el miércoles por un importante analista de Tesla seguía siendo impactante.

Según Colin Langan, de Wells Fargo, el crecimiento del volumen de ventas del fabricante de vehículos eléctricos será nulo este año. Y en 2025, será aún peor: los volúmenes caerán.

Acciones de Tesla se resienten de las proyecciones

Las acciones de la empresa reaccionaron en consecuencia, y el miércoles cayeron hasta un 4,1% para situarse en un mínimo de 10 meses. Solo este año, los títulos han cedido un 31%, perdiéndose un repunte más amplio que ha hecho subir al índice S&P 500 un 8,5%.

La razón es clara: la capacidad de Tesla para crecer al ritmo vertiginoso que promete su costosa valoración ya no es una garantía. La empresa sigue cotizando a un múltiplo significativamente más alto que el de otras empresas de gran capitalización, pero el ritmo de expansión de sus ingresos y ganancias se ha desacelerado notablemente desde el año pasado.

“En este momento, el mercado está votando y diciéndonos que cree que Tesla no merece actualmente esa alta valoración”, dijo en una entrevista Adam Sarhan, fundador y director ejecutivo de 50 Park Investments. “Por ahora, los vendedores tienen el control y el mercado necesita un catalizador alcista para entusiasmarse”.

Proyecciones

Wall Street ha estado haciendo sonar con fuerza las alarmas sobre Tesla desde principios de marzo, después de que las decepcionantes cifras de China, los datos de países europeos y una interrupción de la producción en su fábrica cerca de Berlín apuntaran a que las entregas del primer trimestre no cumplieron con las expectativas promedio de los analistas.

La respuesta de Musk —bajar los precios para impulsar la demanda— también está perdiendo fuerza.

Langan, de Wells Fargo, fue el último en señalar que el crecimiento de la compañía en sus mercados principales se ha moderado, al rebajar el miércoles las acciones al equivalente de una calificación de venta.

El fabricante de vehículos eléctricos es ahora una “empresa en crecimiento sin crecimiento”, escribió Langan en una nota a sus clientes. Destacó que los volúmenes de ventas aumentaron solo un 3% en el segundo semestre de 2023 con respecto al primero, mientras que los precios cayeron un 5%.

Tesla ha bajado los precios en China varias veces desde finales de 2022, desatando una guerra de precios internacional.

Los problemas para Tesla y los vehículos eléctricos en general empezaron a surgir a mediados de octubre, cuando la empresa de Musk advirtió por primera vez sobre una desaceleración de la demanda.

Pero el sentimiento empeoró aún más a principios de enero después de que Tesla dijera que su crecimiento será “notablemente menor” este año. Otros fabricantes de automóviles, proveedores de vehículos eléctricos e incluso empresas de alquiler de vehículos se sumaron con comentarios igualmente cautelosos.