La Corporación Chilena de la Madera (Corma) lamentó el ataque a dos torres de vigilancia de incendios y dio a conocer que un 64% menos de superficie ha sido afectada por los siniestros en la región del Bío Bío.

En efecto, Corma realizó en Concepción su balance de la presente temporada de incendios. Los datos dan cuenta que hasta el 15 de enero de este año, arrojan 619 hectáreas afectadas, en comparación a las 1.740 arrasadas a esta fecha en la temporada pasada.

Juan José Ugarte, presidente del gremio, reconoció que en los buenos resultados ha colaborado el clima y llamó a estar alertas, pues se pronostican días de altas temperaturas, baja humedad y vientos considerables.

El directivo destacó la importancia de atacar en los primeros 20 minutos los focos de incendio, para lo cual es primordial contar con torres de vigilancia.

Al respecto, lamentó que dos de ellas fueran atacadas en los últimos días en Mulchén y Contulmo.

Las torres de vigilancia son nuestros ojos, son los ojos de la comunidad, los ojos de la oficina.
- Juan José Ugarte, presidente de la Corporación Chilena de la Madera

El resultado hasta ahora ha sido posible gracias a una mejor coordinación con la Corporación Nacional Forestal (Conaf), que establece que la institución esté más cerca combate el incendio, sin importar de quien sea el terreno.

Además, gracias a modelos predictivos compartidos, cuando se detecta un riesgo mayor se activa inmediatamente un comando de incidentes, como se hizo el 3 de enero en Santa Juana.

Según explicó Ramón Figueroa, encargado del Departamento de Prevención y Detección de Incendios del gremio, esa tarde se iniciaron tres focos simultáneos a orillas de la carretera a la altura del expeaje San Roque, y las proyecciones establecieron que se quemarían unas 9 mil hectáreas.

Finalmente, la empresa celulosa CMPC, Conaf y Arauco atacaron cada una un siniestro, lo que permitió controlar en algunas horas lo que habría sido un desastre mayor.

“Yo creo que fundamentalmente el trabajo en equipo, la coordinación y el protocolo fue una herramienta clave”, aseguró Figueroa.

Este nivel de coordinación es una de las medidas que surgieron como lecciones del desastre del verano de 2017.

Actualmente, el trabajo colaborativo público privado considera una Alerta Temprana por incendios, además de una prevención comunitaria en que se trabaja desde hace dos años con más de 300 comités vecinales en 73 comunas de siete regiones del país.

Así lo destacó Héctor Jorquera, coordinador de la red de prevención comunitaria que puso en marcha Corma.

Este lunes se contabilizaban 23 incendios en la macrozona forestal, de los cuales sólo uno se mantenía hoy activo.

Mientras que la masiva concurrencia a la celebración religiosa de San Sebastián en Yumbel genera preocupación, pues en el evento se espera que asistan unas 200 mil personas, donde piden extremar los cuidados en el uso del fuego.