La modernización al sistema tributario en la que trabaja el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, contará con un apartado especial para la llamada “economía digital”, con el objetivo que aplicaciones de transporte, comercio y entretenimiento, entre otras, paguen impuestos en Chile.

Tras el anuncio realizado este jueves, una de las incumbentes, Uber en concreto, salió -en parte- a rechazar la medida y a pedir consideraciones especiales.

En linea con lo anterior, su principal competencia en el país, Cabify, hizo lo contrario y recibió con alegría la iniciativa de Hacienda. En conversación con BioBioChile, su gerente, Agustín Guilisasti, confirmó la postura de la empresa.

El ejecutivo calificó como positiva la discusión al respecto, todo con el propósito que el rubro “se regule”.

Además, Guilisasti aseveró que la compañía paga impuestos en Chile, que se constituyó como empresa de transporte y explicó como ésta tributa en Chile.

Jorge Fuica | Agencia UNO
Jorge Fuica | Agencia UNO

Pago de impuestos

En primer lugar, aclaró que el transporte en el país está exento de IVA, pero que quienes se desempeñan en esta área sí están afectos al pago del 7% de “renta presunta” por los móviles manejados, por concepto del avalúo fiscal.

Así, si un automóvil cuesta $5 millones, su conductor deberá pagarle al Fisco $350 mil en impuesto al año, como lo hacen sus conductores.

En este punto, Guilisasti dijo entender a los taxistas. “Tienen toda la razón (de molestarse) porque ellos pagan impuesto y otros no”, dijo.

“Cuando partimos en Chile como empresa de transporte decidimos utilizar la app para diferenciarnos de otros servicios”, señaló, y que como firma -efectivamente- reconocen todos los ingresos que perciben, algo que se extiende a sus trabajadores.

¿Pero, cómo hacen esto? “Porque les exigimos un documento tributario”, reveló el gerente.

“Para pagarles deben mostrarnos sus boletas de honorarios o facturas, por ende, ellos reconocen sus ingresos”, indicó.

“Si un conductor que gana $2 millones al mes se le retiene el 10% mensual, al año acumulará $2,4 millones en retenciones. Dependiendo de la escala en la que se encuentre podría pagar hasta más de $1 millón en impuestos y el resto se lo devuelve el Servicio de Impuestos Internos (SII)”, detalló.

Pero sin culpar de forma directa a Uber, Guilisasti dejó entrever que su competencia no hace lo mismo.

“Hay otras plataformas que no hacen esto, se va todo al bolsillo (…). Está mal, eso hay que regularlo”, sentenció.

No obstante, y ante nuestra pregunta, declinó comentar acerca de la forma en la cual Uber evadiría impuestos en Chile.

“No sé la parte técnica, no conozco su modo tributario y no me atrevería a hablar de eso. Pero sí sé que parte de sus socios (conductores) no pagan nada (en impuestos)”.

Cancha pareja

“El SII ha venido en varias ocasiones y ha encontrado todo en norma. Yo creo que nos consideran casi que sus amigos porque, de cierta forma, funcionamos como ente recaudador”, reveló Guilisasti.

En esa línea, destacó que las exigencias que ponen a sus trabajadores los ayudan a futuro demostrando ingresos de manera legal “a la hora de pedir créditos (de consumo), hipotecarios, comprarse otro auto”.

De esta manera, y pese a que Guilisanti valoró el anuncio del ministro Larraín, sí dijo esperar que la imposición tributaria se haga de manera de emparejar la cancha con exigencias justas.

“Espero que sea igual para todos, aunque los taxistas tengan que ceder en algunos puntos y nosotros en otros”, declaró.

Por ello es que no le agrada la idea que, por ejemplo, se les cobre IVA, siendo que nunca se ha cobrado este impuesto al transporte.

Aún así, destacó el actuar que Cabify ha tenido a lo largo del tiempo, especialmente en materia impositiva.

“Si se regula podría ser un bombazo, imagínate si llegaran a cobrar impuesto por todo lo que una persona ha ganado trabajando en esto. Piensa en una persona que ha ganado varios millones en 4 años, es como mucho. Hemos sido precavidos, como corresponde”.

¿Cómo evadiría impuestos Uber?

Ya en 2015, tras su fundación en 2009, diversos portales internacionales hacían eco de la presunta forma en la cual esta popular app de San Francisco, Estados Unidos, evadiría tributos en el extranjero.

Fortune fue uno de ellos, asegurando que la empresa habría utilizado la simpleza de su servicio para limitar los impuestos que finalmente paga en suelos foráneos.

Es así como del total de un viaje, el 80% es para el conductor, quien efectivamente pagaría impuestos en su país…solo si declara lo que gana.

En Europa, en tanto, el resto lo retiene Uber BV, domiciliada en Holanda, empresa que paga en impuestos cerca del 1% de lo recaudado tras descontar costos.

El remanente termina siendo enviado a Uber International CV, entidad que tiene su sede en Bermuda, un territorio británico de ultramar que no cobra impuestos a los ingresos corporativos.

Al ser una sociedad controlada por Uber de Estados Unidos, Holanda no le compra impuestos, a lo que se suma que Estados Unidos reconoce a Uber International CV como una empresa holandesa, por lo que le permite diferir el pago de impuestos de manera indefinida, según el medio citado.

Así es como casi nada de la entrada total de Uber International CV, la mayor parte de las ganancias de la empresa estadounidense, no termina en las arcas de ningún Estado…de acuerdo a Fortune.

Sandro Baeza | Agencia UNO
Sandro Baeza | Agencia UNO