El gobernador de Santiago, Claudio Orrego, analizó el estudio que se realizó al respecto y lamentó que el mercado ilegal resulte atractivo "tanto para vendedores como compradores".

Una investigación impulsada por el Gobierno de Santiago, titulada “Caracterización del Comercio Ambulante de la región Metropolitana” -y que fue solicitada al Centro de Políticas Públicas UC con la asesoría de la Cámara Nacional de Comercio- arrojó datos precisos de quienes se desempeñan en esa actividad en la capital.

El análisis reveló que la desarrollan tanto hombres como mujeres en igual proporción, mayoritariamente entre los 30 y 49 años.

Además, se evidenció que la mayoría cuenta con enseñanza media completa y que, habitualmente, son jefas o jefes de hogar que están a cargo de menores de edad.

En cuanto a la nacionalidad, se pudo constatar que el 42% corresponde a personas extranjeras, de las cuales el 36,5% cuenta con una visa o residencia y el 49,1% no cuenta con una condición migratoria regular.

En relación a los bienes transados, el estudio señaló que ropa y comida lideran los tipos de productos ofertados, mientras que, en mucho menor medida, se ubican aquellos productos ilegales como cigarros, medicamentos y artículos falsificados.

Una de las principales preocupaciones que levantó la investigación apunta a la falta de permiso municipal para la venta: el 72,2% de los encuestados no cuenta con tal autorización.

Entre el porcentaje proclive a formalizar o regularizar su actividad, un 57,7% de vendedores está dispuesto a obtenerlo por medios oficiales, sin embargo, el proceso se percibe como “difuso, engorroso y con una escasa probabilidad de éxito”.

Desde el punto de vista de los compradores, el 82,9% está de acuerdo con que se entregue un lugar y un permiso a quienes ejercen esta labor, aunque mayoritariamente esto aplica “solo si cuentan con su situación migratoria regularizada”.

El estudio mencionó que el 82,9% de los vendedores manifestó satisfacción con la actividad y un 54,3% no estaría dispuesto a dejarla, valorando atributos como la flexibilidad laboral, autonomía y liquidez financiera.

De hecho, se estimó que el ingreso promedio diario en esta actividad es de $40.000, con una jornada laboral de 6 días a la semana, en los que trabajan en promedio 8,3 horas diariamente.

Los datos además mostraron que el 56,5% de los vendedores declaró estar dispuestos a regularizar su situación laboral, sin embargo, de ellos, solo el 39,3% tiene voluntad para formalizar su emprendimiento y dejar de vender en la calle.

“Mercado ilegal es muy atractivo tanto para vendedores como compradores”

Este levantamiento de información se realizó entre marzo y junio de 2023.

Se seleccionaron 20 puntos con alta presencia de comercio ambulante en 13 comunas de la región Metropolitana (Santiago; Estación Central; Providencia; Recoleta; La Florida; Puente Alto; La Cisterna; Maipú; Lo Prado; San Bernardo; Independencia; Quilicura y Melipilla).

El gobernador de Santiago, Claudio Orrego, señaló que “el estudio es concluyente y define múltiples variables en la problemática del comercio ambulante. Por ejemplo, con esta radiografía nos percatamos que el mercado ilegal es muy atractivo tanto para vendedores como compradores”.

Por el lado de los vendedores, agregó la autoridad, resultan atractivos “los niveles de ingresos a los que acceden, así como otros beneficios de la actividad que se vinculan a la baja disposición a la formalización o la reconversión laboral”.

Orregó señaló también que incluso, tras recibir una sanción, “el 70% de quienes ejercen el comercio ambulante señala que continuaría con la actividad, mientras que un 67% de los compradores haría lo mismo”.

Por ello, concluyó que estas cifras son muy útiles en la reformulación de una estrategia que permita “desarticular este tipo de comercio, enfocándonos en perseguir el origen del comercio ilegal para así hacerlo menos atractivo para aquellos que lo ejercen”.