El Banco Mundial manejó mal las denuncias de acoso sexual presentadas por varias mujeres contra un alto funcionario, que se convirtió luego en ministro en Costa Rica, según las conclusiones de un tribunal interno del banco.

El caso involucró informes perturbadores que datan de 2009, según los cuales el funcionario invitó a jóvenes colegas a habitaciones de hotel, trató de engañarlas para que lo besaran y les hizo comentarios inapropiados.

El funcionario fue degradado pero no despedido de su cargo, según el tribunal administrativo que representa el último recurso para los empleados que presentan quejas.

Esta es la controversia más reciente en esta institución financiera con sede en Washington, luego de que una investigación interna revelara que funcionarios habrían presionado a economistas para alterar los resultados de su informe “Doing Business”, que clasifica a los países según sus políticas favorables a las empresas.

El informe implicó a la jefa del FMI, Kristalina Georgieva, que tuvo un cargo de alto nivel en el Banco Mundial, pero el directorio del FMI expresó la semana pasada su confianza en ella y concluyó que no se mostraba que “cumplió un papel inadecuado”.

Los hallazgos en el caso de acoso sexual fueron detallados en un informe publicado el lunes por The Wall Street Journal, que identificó al funcionario como Rodrigo Chaves, candidato a la presidencia de Costa Rica que se desempeñó brevemente como ministro de Finanzas del país.

“Este caso ha dado visibilidad a las deficiencias en el enfoque del Banco sobre la responsabilidad por el acoso sexual y la protección del personal”, aseguró el informe del tribunal, que identificó al funcionario solo como “Señor C.”.

Chaves negó cualquier conducta indebida o las atribuyó a diferencias culturales, pero la investigación, con entrevistas a 27 testigos, describió un patrón de “avances despiadados e indeseados”.

Annette Dixon, vicepresidenta de recursos humanos del Banco Mundial, dijo que la institución está “fuertemente comprometida con fomentar un ambiente de trabajo seguro, libre de acoso y abuso y donde el personal se sienta capacitado para denunciar acusaciones de irregularidades”.

“Como muchas organizaciones grandes, sabemos que siempre podemos hacerlo mejor”, reconoció en un comunicado.

En enero, el Banco Mundial impuso una prohibición de “no volver a contratar” a Chaves y le prohibió la entrada a las instalaciones. El tribunal interno también ordenó al Banco Mundial que pagara los costos legales para dos de las mujeres.

Chaves, quien trabajó en el banco durante casi 27 años, renunció el 30 de noviembre de 2019 poco después de ser degradado y luego se convirtió en ministro de Finanzas de Costa Rica, donde mantuvo relaciones con su antiguo empleador.

Renunció como ministro de Finanzas en mayo de 2020 en medio de disputas con el presidente Carlos Alvarado relativas al gasto. Actualmente es candidato en las elecciones presidenciales de febrero.