Los mercados mundiales optaron por la prudencia este viernes ante los nuevos datos sobre el aumento del desempleo en Estados Unidos, mientras el alza de los precios del petróleo no consiguió devolverles la sonrisa a los inversores.

París cerró con una caída del 1,57%, Fráncfort se dejó el 0,47% y Londres el 1,18%, al igual que Milán que retrocedió 2,67% mientras Madrid cerró con una modesta subida del 0,11%.

Wall Street estaba en territorio negativo y el índice estrella Dow Jones Industrial Average caía 1,97%, el índice ampliado S&P 500 cedía 2,44% y el Nasdaq, de fuerte contenido tecnológico, perdía 1,83%.

“El mercado del empleo en Estados Unidos es mucho más flexible que en Europa y por tanto el impacto” de la epidemia de coronavirus en “la destrucción de empleo es sumamente rápida”, dijo Didier Saint-George, miembro del comité de inversiones de Carmignac.

La economía estadounidense sufrió en marzo los primeros efectos de la crisis del coronavirus, con el aumento de la tasa de paro al 4,4% y 701.000 empleos destruidos, según datos del departamento de Trabajo, que subraya que “no se puede cuantificar con precisión los efectos de la pandemia en el mercado de trabajo en marzo”.

“Es algo espectacular, es por lo que bajan los mercados”, comentó Saint-George, pese a que estas estadísticas no constituyen una “enorme sorpresa”.

El mercado de trabajo estadounidense no es el único que ha sufrido por la epidemia. Las perspectivas económicas no parecen mucho mejores para Europa.

La actividad del sector privado en la zona euro cayó en marzo a su nivel histórico más bajo, según la segunda estimación del índice PMI publicado el viernes por Markit.

“En lo que todo el mundo está prácticamente de acuerdo hoy es que tendremos una caída del PIB en el segundo trimestre del orden del 20% al 25% entre Europa y Estados Unidos, mientras Asia está en una situación un poco más favorable”, estima Regis Begué, director de gestión de acciones del banco Lazard Freres Gestion.

En China, la actividad de servicios volvió a contraerse en marzo, según un índice independiente publicado el viernes.

En paralelo los precios del petróleo aumentaban con fuerza este viernes, un día después de una subida histórica provocada por la esperanza de una reducción de la producción en una reunión urgente de la OPEP y sus socios prevista el lunes y las declaraciones del presidente Vladimir Putin, que prevé una reducción de la producción mundial de unos 10 millones de barriles diarios para equilibrar el mercado.

Al cierre de las transacciones europeas, el Brent que se cotizaba en Londres a 34,10 dólares, un aumento del 13,94%.

En Nueva York, el barril de WTI para entrega en mayo ganaba un 10% a 29 dólares.