El James Webb logró captar algunas de las galaxias más lejanas a la fecha, cuya luz tardó miles de millones de años en llegar a nosotros y que surgieron poco después del Big Bang.

Esta semana se conoció uno de los hallazgos más importantes del Telescopio Espacial James Webb (JWST) y que además marca un hito en las capacidades del instrumento, que ahora logró captar las galaxias más lejanas jamás vistas en la historia de la observación astronómica.

Este además sería el descubrimiento de las primeras galaxias que surgieron después del Big Bang. Así lo explicó la NASA en un comunicado, resaltando que la luz de estas estructuras lejanas, tardó alrededor de 13.400 millones de años en llegar a una zona donde el James Webb pudiera notarla.

“La luz de estas galaxias ha tardado más de 13.400 millones de años en llegar hasta nosotros, ya que datan de menos de 400 millones de años después del Big Bang, cuando el universo tenía solo el 2% de su edad actual”, señala la agencia espacial.

El hallazgo fue posible gracias a las observaciones espectroscópicas del telescopio, que anteriormente ya había detectado luces que los astrónomos catalogaron como candidatas a galaxias primeras en nacer.

El James Webb reunió a decenas de científicos para buscar galaxias tempranas

Además, se dio luego de una colaboración entre científicos que fueron parte del desarrollo de algunas piezas del James Webb. Como la cámara de infrarrojo cercano (NIRCam) y el espectrógrafo de infrarrojo cercano (NIRSpec).

Esto último debido a que la creación de estas piezas del telescopio tienen específicamente objetivos orientados al estudio de galaxias “tempranas”, que están lejanas y por ende emiten un la luz más débil.

Estas investigaciones también son parte del programa Advanced Deep Extragalactic Survey (JADES) del James Webb, que tiene como objetivo sacar el mayor provecho del telescopio para observar el “universo primitivo”. En este colaboran más 80 astrónomos de 10 países diferentes.

“Estos resultados son la culminación de por qué los equipos de NIRCam y NIRSpec se unieron para ejecutar este programa de observación”, comentó a la NASA la coautora del estudio Marcia Rieke, investigadora principal de NIRCam, de la Universidad de Arizona en Tucson.