China se prepara para comenzar la misiòn "Earth 2.0", que busca encontrar planetas similares a la Tierra. Se espera lanzar el satélite en 2026.

Se trata de un satélite que explorará la Vía Láctea en busca de planetas que orbiten estrellas parecidas al Sol. Esta es la primera misión espacial de China que estudiará exoplanetas (planetas que orbitan una estrella diferente al Sol) y se esperan encontrar cuerpos celestes parecidos a la Tierra.

Durante este mes los científicos encargados de la misión publicarán documentos donde podremos conocer el plan en más detalle, así lo informó la revista Nature hace algunos días.

Hasta ahora se sabe que su objetivo es estudiar planetas fuera del Sistema Solar, para buscar uno con características similares a la Tierra y que orbite en la zona habitable de otra estrella como el Sol.

Si bien ya se han descubierto más de 5mil exoplanetas gracias al trabajo del telescopio Kepler de la NASA hasta 2018. En su mayoría fueron cuerpos rocosos que orbitaban enanas rojas, similares en forma, pero sin ajustarse a la definición de una Tierra 2.0. El parámetro es que el planeta tenga las condiciones adecuadas para que exista agua líquida.

La tarea no será fácil. “Aun con la tecnología y telescopios actuales, es extremadamente difícil encontrar señales de planetas pequeños similares a la Tierra. Sobre todo porque las estrellas que orbitan son mil millones de veces más grandes y pesadas.” Dijo para Nature, Jessie Christiansen, astrofísica del NASA Exoplanet Science Institute, en California.

La misión, de nombre “Earth 2.0” actualmente está terminando su etapa inicial de diseño y oficialmente será financiada por la Chinese Academy of Science. Se espera que el diseño sea aprobado por el panel de expertos de la academia en junio, para finalmente recibir los fondos y comenzar la construcción del satélite. El equipo espera poder enviarlo al espacio en 2026.

¿Qué nos han compartido sobre Tierra 2.0?

Según los datos publicados en Nature, el satélite se está diseñando para transportar 7 telescopios que observarán el cielo durante un periodo de cuatro años. Seis de ellos trabajarán coordinados para observar las mismas constelaciones que recorrió años atrás el Kepler: Cygnus y Lyra. Esto porque de allí se obtuvieron datos prometedores.

Apuntando hacia allá, los telescopios buscarán exoplanetas detectando los cambios en el brillo de una estrella, que indicarán cuando un planeta pase frente a ella. Al usar varios telescopios pequeños juntos se obtiene un campo de visión más amplio que el de un telescopio de gran tamaño. El campo de visión será 5 veces más ancho que el del Kepler.

En paralelo, el séptimo telescopio tendrá un microlente gravitacional. Este se encargará de explorar planetas que estén lejos de su estrella (como Neptuno) y “planetas rebeldes”, es decir, cuerpos celestes que deambulan por el espacio sin orbitar ninguna estrella. Este telescopio apuntará al centro de la Vía Láctea, donde hay un gran número de estrellas.

Se estima que, con Earth 2.0 se obtengan otros 4 años de datos, que sumados a los ya recopilados por el Kepler, serían un gran aporte para lo que conocemos hoy sobre exoplanetas y la posibilidad de vida en otros sistemas solares.