Entre lágrimas y por segunda vez en menos de un mes, Britney Spears entregó su testimonio ante la Corte de Los Angeles, California, para poner fin al tutelaje legal de su padre, Jamie Spears, y de paso acusarlo de “abuso de tutela”.

“Quiero presentar cargos contra mi padre hoy… Quiero una investigación contra mi papá”, señaló la cantante vía teléfono, en un audio que trascendió a los medios de comunicación ayer miércoles.

“Estoy enfadada e iré por ello… Si el tribunal no ve esto como un abuso… no sé lo que es”, agregó la artista, que incluso señaló que llegó a pensar que “intentaban matarme”.

En la audiencia, la jueza Brenda Penny aceptó la renuncia del anterior abogado de Spears, Samuel Ingham, y señaló que aceptaría en su lugar a Mathew Rosengart, designado por la cantante de 39 años.

“Presentaremos una petición tan pronto como sea posible para apartar al señor (Jamie) Spears de ese rol”, dijo el abogado a la agencia AFP ayer miércoles.

“Como dije en el tribunal, una pregunta muy justa es: ¿por qué el señor Spears no se retira voluntariamente? Ya no pertenece a esta tutela. Y creemos que debería dimitir voluntariamente de inmediato”, añadió.

En redes sociales, tras una intervención ante el tribunal que se extendió por 20 minutos, Spears volvió a referirse al caso utilizando el hashtag que desde hace años se ha convertido en consigna: #FreeBritney.

“Viniendo, amigos… Viniendo”, señaló la cantante en Instagram junto a un emoticón mostrando un dedo índice.

“Nueva con representación real hoy… Me siento agradecida y bendecida! Gracias a mis fans que me apoyan… ¡No tienen idea lo que significa para mí ser apoyada por unos fans tan increíbles! Dios los bendiga a todos”, agregó en el post, que acompañó con un video cabalgando.

“PD: esta soy yo celebrando y montando a caballo y haciendo volteretas hoy! #FreeBritney”, finalizó.