A raíz del estreno en Europa de Pavarotti, un documental de Ron Howard (Una mente maravillosa, Apolo 13, El código Da Vinci) sobre el afamado tenor italiano, su viuda Nicoletta Mantovani reveló destalles desconocidos de la vida íntima del músico: desde algunas de sus obsesiones hasta el origen de su historia de amor.

“Nos enamoramos con esa clase de amor tan fuerte que pasas horas y horas juntos hablando de la nada, mirando las nubes, disfrutando del hecho de estar juntos”, comentó al matutino inglés The Times, donde además reveló cómo fue ella misma, en calidad de amante, quien le informó a la esposa de Pavarotti, Adua Veroni, sobre su relación amorosa.

“Luciano me había dicho que ellos ya habían acabado, que no era mi culpa. Creo que en realidad nunca hay un culpable. Nada puede empezar si lo anterior no ha acabado (…). Bueno, no se puso muy contenta, pero creo que era importante hablarlo. El diálogo siempre es bueno, es mejor encarar las cosas que crear malentendidos”, rememoró la otrora asistente del tenor.

Nicoletta Mantovani
Nicoletta Mantovani | AFP

A pesar del conflicto, ambas mantuvieron una cordial relación. Sin embargo, los principales problemas los tuvo con la prensa europea, que dio espacio a los rumores sobre un eventual interés económico en el matrimonio de Mantovani. “Si quieres jugar al juego, tienes que aceptar las normas”, reflexionó sobre aquellos días.

En el documental, además, detallará la relación que tuvo con Pavarotti durante la última etapa de su matrimonio, donde trascendieron fuertes discusiones. “La pasión lo es todo, así que nos peleábamos”, según ella, “sólo a gritos”.

En 2007, una amiga de Pavarroti reveló al diario italiano La Stampa una confesión del tenor: “Estoy fatal. Estos últimos años, Nicoletta me está atormentando, mis amigos no vienen a verme, me hace vivir solo, estoy aislado, critica a mis hijos, me rodea de personas que no me gustan. Me ha alejado incluso de Tino y Veronica, (dos colaboradores) que eran como mis hijos. Tenía necesidad de Veronica. Estaba desesperado”, dijo.

11 años después de aquella entrevista, la viuda reconoció que no todo fue paz entre ambos. Uno de los principales focos de conflicto era su salud. “Sí, quería que comiera menos, pero por su salud, no por su imagen, por supuesto. Quería que caminara un poco más, que hiciera algo de ejercicio”, dijo.

En el documental, también abordará una de las peticiones expresas que le hizo el tenor sobre la única hija que concibieron juntos, Alice: no cantarle canciones de cuna, ya que no quería “mal acostumbrar” los oídos de la niña con una voz que no fuera la suya.