100 fotografías en copias originales de la gran fotógrafa norteamericana se exhiben en el MALBA. 100 fotografías de fines de los 50 e inicios de los 60 que muestran ese ojo agudo, descarnado y humano, capaz de generar empatía con esas personas marginales que Arbus buscó sacar a la luz, mostrar en esas penumbras, esos lugares sombríos, pero como unos otros iguales a ella, a nosotros.

Diane Arbus, MALBA, EM (c)
Diane Arbus, MALBA, EM (c)

Transformistas, el niño en el parque con la granada de juguete, la pareja nudista, los “reyes” de un asilo de ancianos, imágenes de personas en primer plano tomadas de televisores son algunos de los temas abordados por Arbus (Nueva York, 1923-1971) en su primera etapa como fotógrafa “independiente”.

Ver la exposición “Diane Arbus. En el principio”, fotografías tomadas entre 1956 y 1962, curada por Jeff L. Rosenheim (Curador en Jefe de Fotografía de The Metropolitan Museum of Art Nueva York), es la posibilidad de apreciar una de la artistas claves del sXX, y en especial ver una búsqueda, una mirada curiosa y humana, de los intersticios, de los seres marginados, de lo que estaba fuera de ese Estados Unidos potencia mundial avasalladora, que mostraba una cara triunfante (y muy conservadora), sin grietas, en plena Guerra Fría.

Lady on a bus, NYC, 1957, MALBA (c)

Una mirada que no tiene nada de voyerista, que no busca el porno social, que no es crónica amarilla ni crónica roja. Parece más bien una búsqueda urgente, un tanto angustiada, de un otro marginado con el cual identificarse. En una época marcada por la segregación, la reafirmación de modelos excluyentes (contra los negros, los mexicanos, los indígenas y un largo etcétera), Diane Arbus se interesa por lo que quedaba en la sombra. Y muestra a esas personas en su dignidad sin idealizaciones.

Diane Arbus logra hacer de cada fotografiado un protagonista, alguien que mira directo, que parece en ese momento desprenderse de su entorno, abandonar lo que está haciendo para mirarla (mirarnos) en el momento del ¡click! Logra captar esa luz de vida (divina para algunos) en esas personas que transitaban -marginados- por las penumbras.

Sala de la exposición de Diane Arbus, MALBA (c)
Sala de la exposición de Diane Arbus, MALBA (c)

La exposición, que se está exhibiendo hasta el 14 de septiembre en el MALBA (Buenos Aires), además de traer unas copias extraordinarias, está montada de una manera notable. En ella no hay jerarquías, fotos o temas más importantes, lo que no impide que haya un remate, un final de recorrido que permite al visitante tomarse un tiempo y cerrar una experiencia fuerte y estimulante.