Falleció Roberto Garretón Merino (Santiago, 21 de diciembre de 1941), abogado de la Universidad de Chile, destacado defensor de los Derechos Humanos en Chile y en Latinoamérica.
Garretón, junto a Andrés Aylwin, Nelson Caucoto, Jaime Castillo Velasco, José Zalaquett, entre otros, forma parte de un grupo de personas -abogados en su gran mayoría- que fueron grandes defensores de los Derechos Humanos durante la dictadura cívico-militar como en los años posteriores. Personas que lograron influir en la sociedad chilena frente a un tema tan doloroso, traumático y central para desarrollar una sociedad verdaderamente democrática.
Roberto Garretón Merino
Roberto Garretón fue abogado del Comité Pro Paz (dirigido por José Zalaquett), jefe del Área Judicial de la Vicaría de la Solidaridad y funcionario de Naciones Unidas, entre otras labores centradas en la defensa de los Derechos Humanos.
Después del Golpe Cívico Militar de 1973, Roberto Garretón se incorporó al equipo de abogados del Comité Pro Paz (Comité de Cooperación para la Paz en Chile), creado en agosto de ese año por iglesias cristianas y la comunidad judia, a instancias del cardenal Raúl Silva Henríquez. Dirigido por José Zalaquett, fueron los primeros en defender a perseguidos políticos ante Consejos de Guerra, detenidos y personas desaparecidas.
Roberto Garretón se incorporó en 1976 al equipo de abogados de la Vicaría de la Solidaridad, liderados por Alejandro González. En 1981 se transforma en jefe del equipo jurídico de la Vicaría.
El trabajo de la Vicaría no sólo permitió defender a víctimas de la dictadura y apoyar a sus familiares. También hicieron un notable trabajo para definir las estructuras, integrantes, formas de operar y los recintos clandestinos de detención, tortura y asesinato de opositores a la dictadura de distintos órganos represores.
Fue autor, junto a Manuel Antonio Garretón y Carmen Garretón, del libro “Por la Fuerza sin la Razón, Análisis de los Bandos Militares de la Junta Militar de Chile”, de la Editorial LOM (1998).
Roberto Garretón, durante el gobierno de Patricio Aylwin, dirigió el nuevo departamento de derechos humanos de la Cancillería. El año 1993 fue elegido Vicepresidente de la Conferencia Mundial de Derechos Humanos celebrada en Viena y Vicepresidente de la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.
También fue activo participante en la labor gremial. Fue parte del directorio del Colegio de Abogados de Chile entre los años 1987-1991; 1991-1995 y 2000-2001.
Premio Nacional de Derechos Humanos 2020
“Si yo lo recibo hoy día, es porque al consagrar mi vida a la defensa de los derechos humanos encontré, en quienes luchaban en la Vicaria de la Solidaridad y en muchas otras instituciones y en la víctimas que me solicitaban mi cooperación, el valor, la resiliencia, la capacidad de levantarse y luchar contra la injusticia”.
Esas palabras, dichas por Roberto Garretón al recibir el Premio Nacional de Derechos Humanos 2020, reflejan su espíritu. Porque esas personas e instituciones eran un espejo de su valor, de sus deseos de justicia.
Valores para cambiar Chile
Roberto Garretón es parte de ese selecto grupo de personas que pusieron el respeto a los seres humanos -y sus derechos fundamentales- por sobre seguridad personal, a sus temores y sus posturas políticas. Es parte de esas personas que han permitido a Chile ir haciendo -con todas las dificultades y cortapisas puestas por los antiguos defensores de Pinochet- de los Derechos Humanos algo básico y constitutivo de nuestra sociedad (o, al menos, eso esperamos de la nueva Constitución).
Garretón, junto a los abogados mencionados y tantos más, a activistas y familiares de detenidos desaparecidos y ejecutados políticos, entre otros, han sido fundamentales para cambiar la cultura del país. Para hacer transitar nuestra cultura, nuestra sociedad, desde una regida por ideologías, religiones, por ideas de clases y de privilegios conquistados -y heredados-, a una sociedad donde se busca poner a los seres humanos, con sus diferencias y en su diversidad, en su contexto, el centro.
Roberto Garretón fue un humanista en el sentido amplio y profundo.
Hoy, Chile está -o debiera estar- de luto.