Revuelo han causado los recientes dichos del filósofo Guy Sorman contra el fallecido pensador francés Michel Foucault, a quien acusó de haber abusado de niños en su estadía en Túnez en 1969.

“Tenían 8, 9, 10 años. Les lanzaba dinero y les decía: ‘Nos vemos a las diez de la noche en el lugar habitual’”, señaló en diálogo con el diario The Sunday Times, donde recordó parte de su visita al intelectual en Sidi Bou Said, Túnez, durante la Semana Santa de 1969.

Según su relato, el lugar habitual era el cementerio del pueblo. “Allí hacía el amor en las lápidas con los muchachos. Ni siquiera se ha planteado la cuestión del consentimiento”, agregó.

De acuerdo a Sorman, reconocida firma del circuito intelectual europeo, el hecho fue presenciado por otras personas que participaron del mismo viaje. “Los niños pequeños corrían detrás de Foucault diciendo ‘¿y yo? ? Llévame, llévame’”, dijo.

“Había periodistas presentes en ese viaje, hubo muchos testigos, pero nadie escribió historias así en ese momento”, añadió.

La razón del silencio alrededor de sus actos, según Sorman, se debió a la reputación del autor de “Vigilar y Castigar”: “Es como un dios en Francia (…). Foucault no se habría atrevido a hacer eso (ahí)… Hay una dimensión colonial en esto. El imperialismo blanco”.

Las declaraciones han recorrido el mundo, causando un álgido debate alrededor de la figura de Michel Foucault, uno de los filósofos e intelectuales galos más influyentes del siglo 20.

“Lo que hizo Foucault con niños pequeños en Túnez, y que yo vi y que me reproché por no haber denunciado en su momento, me lleva no a rechazar la obra de Foucault, sino a mirarla de una manera diferente”, dijo.

“Creo que sobre esto se habla mucho en Estados Unidos, la llamada cultura de la cancelación. No, no hay que cancelar nada, pero hay que verlo con doble mirada”, reflexionó Sorman.