Empezar el día con un buen desayuno es fundamental para tener la energía suficiente y sentirse bien. Eso dependerá tanto de los alimentos que vayamos a consumir como del tiempo que le dediquemos, sobre todo para los diabéticos, ya que esto afecta en el metabolismo del cuerpo y este no es capaz de procesar el azúcar adecuadamente sin un buen desayuno que te permita comenzar bien el día.

Si no te haces el tiempo para tomar un buen desayuno todas las mañanas, es recomendable que cambies ese mal hábito. Esta es la comida más importante del día para rendir bien durante toda la jornada, sobre todo para aquellos que sufren de diabetes, ya que postergar el ayuno nocturno afecta en el metabolismo que hace nuestro cuerpo para procesar el azúcar y termina acumulando grasas, según un estudio realizado por el Departamento de Nutrición de la U. Harvard.

Como la diabetes es una enfermedad que se relaciona con el aumento del azúcar en la sangre producto de un mal funcionamiento de la insulina, el desayuno es fundamental para mantener los niveles de azúcar equilibrados. Es por ello que el desayuno no debe ingerirse más allá de una hora después de haberse despertado y es importante tomarse el tiempo que se estime necesario para desayunar, pero al menos entre unos 15 a 20 minutos.

Pamela Reyes, nutricionista del Edificio Médico Apoquindo, le recomienda a los diabéticos desayunar: una taza de leche de 200 cc y media marraqueta (o dos rebanadas de pan de molde integral) con palta. Reyes llama a evitar el azúcar, y productos como la mantequilla, la margarina, el paté, la mermelada y el dulce de membrillo.

Algunos alimentos de bajo índice glicémico, ayudan a los diabéticos a mantener el equilibrio de azúcar, como las frutas y las verduras, que son ideales para que sean consumidas a lo largo del día. Reyes recomienda comer diariamente un par de porciones de frutas fraccionadas y dos porciones de verduras.