Fumar es uno de los “malos” comportamientos que inundan en nuestro planeta, y pese a la serie de medidas que se han instaurado para disminuir el consumo del tabaco a nivel mundial, hay un gran número de la población que aún sucumbe ante el humo del cigarro.

Y como un método para alentar a las personas a que dejen de consumir tabaco, el tercer jueves de noviembre de cada año se realiza el evento ‘Great American Smokeout’ organizado por la Sociedad Estadounidense del Cáncer, cuya única finalidad es disminuir el número de fumadores activos a nivel global.

Como una forma de disminuir el porcentaje de fumadores, la cadena ABC Mundo en conjunto con Carlos Jiménez, director del programa de investigación en tabaquismo de la Sociedad Española de Neumología (SEPAR), dieron una pauta con las 5 fases que todo fumador pasa cuando se atreve a dejar el cigarrillo.

Fase 1- De la decisión a la duda

Esta es la primera etapa, donde supones haber dejado el cigarro. En esta oportunidad has arrojado el paquete a la basura, los encendedores y te has prometido a ti mismo que será el último adiós a la nicotina. Aquella determinación es el primer paso.

Estás bien y luego te preguntas, ¿Podré esta vez? ¿Será un buen momento para dejar de fumar? Sin embargo, una convicción interna de que sí podrás te hace pasar el día entero alejado del cigarrillo.

Fase 2- Al otro día

Ya ha pasado un día completo desde que fumaste el último cigarro y te sientes que lo has conseguido. Tu primer respiro de la mañana puede estar un tanto bloqueado, pero ahí te das cuenta que es mucho mejor despertar sin ese olor a tabaco tan característico hasta el día anterior, e incluso tu humor mejora y andas contento por la vida.

Sin embargo, aquellos sentimientos de felicidad sufren a las 48 horas de haber dejado el tabaco; momento en que aparece la irritabilidad y la ansiedad que según el experto suelen durar hasta seis semanas.

Pero no todo es malo, ya que a los 20 minutos del último cigarrillo, la tensión arterial y la frecuencia cardíaca alcanza niveles normales. Pasadas las ocho horas, los niveles de monóxido de carbono y oxígeno en sangre también se normalizan y pasadas las 48 horas, comienza a notarse la diferencia en los sentidos del gusto y el olfato que irá en incremento durante las siguiente tres semanas.

Fase 3 – Desde la sexta semana hasta aproximadamente los 3 meses

En este periodo el desánimo y la tristeza se presentan en un 30 % de las personas que dejan de fumar. Del mismo modo, la ausencia de cigarro puede provocar en las personas llantos, risas inapropiadas o respuestas emocionales desproporcionadas como reacción a la afectación física y que no implican ningún problema psiquiátrico.

Asimismo, en el primer semestre se presenta un claro aumento de peso, por eso es vital hacer actividad física de carácter intensa para remediar el aumento en kilos. Según afirma el experto, para cuando termina esta fase, ya se ha recuperado por completo el gusto y el olfato, ha disminuido la tos, ha mejorado notablemente la capacidad física y la respiración ha mejorado de forma considerable, debido a que los cilios de los pulmones se han regenerado.

Será que meu namorado fuma? Kk #cigarette #cigarro #cinzeiro

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Fase 4 – De los tres a los seis meses

En este periodo de tiempo se presenta una disminución considerable de la sintomatología del síndrome de abstinencia y el fumador se acostumbra a no depender de la nicotina. “Incluso la imagen interna que tenía de él se modifica y ya no se imagina con un cigarro en la mano, sino como una persona mucho más saludable”, indicó Jiménez al medio ABC.

Durante este tiempo se ve una leve normalización del peso, la cual será más notoria pasado los 6 meses de haber probado el último cigarro. Razón por la cual los expertos sugieren que la persona siga con la actividad física, la cual llega a mejorar la fertilidad a partir del tercer mes.

Fase 5 – A 6 meses de haber dejado el cigarro

Este periodo va de los 6 a los 12 meses y se conoce como etapa de mantenimiento. Acá disminuye de forma importante el riesgo de padecer angina de pecho o un infarto de miocardio, muy frecuentes entre los fumadores, cuenta el experto. Además, a partir del sexto mes sin consumir tabaco ya se puede hablar de ex fumadores, pues las posibilidades de recaer ante un cigarro son muy bajas .