La Cámara de Representantes de Estados Unidos, de mayoría republicana, adoptó el miércoles un compromiso presupuestario negociado con la Casa Blanca y que aleja el riesgo de un default por el resto de la presidencia de Barack Obama.

La medida fue adoptada por 266 votos contra 167. La mayoría de los republicanos votaron en contra, pero otros moderados votaron junto a los demócratas.

El texto fija los presupuestos para los años fiscales 2016 y 2017 y autoriza al Tesoro a continuar tomando deuda en el mercado hasta el 15 de marzo de 2017, asegurando a Obama que no enfrentará una crisis presupuestaria hasta su partida en enero de 2017.

El acuerdo, revelado la noche del lunes, fue negociado discretamente durante semanas entre los líderes republicanos de ambas cámaras, John Boehner y Mitch McConnell, y los jefes demócratas Nancy Pelosi y Harry Reid, con la Casa Blanca.

Ahora el texto debe ser aprobado por el Senado antes de la fecha límite del próximo martes.

El compromiso pone un inesperado punto final a cinco años de diálogo de sordos entre Obama, armado de su derecho a veto, y los republicanos determinados a reducir los gastos del Estado Federal.