El régimen recuperó este viernes una base aérea en el sur de Siria después de la retirada de los insurgentes, que controlaron parte de las instalaciones durante unas horas, informa el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).
“Los rebeldes se retiraron de las zonas que controlaron en el aeropuerto Al Thala después de bombardeos aéreos intensos del régimen y la llegada de refuerzos de las Fuerzas de Defensa nacional y de los comités populares” de las milicias fieles al gobierno, informó a la AFP Rami Abdel Rahman, director del OSDH.
El jueves la ONG anunció la toma de este aeropuerto utilizado por los aviones del régimen para bombardear las provincias de Deraa y de Damasco.
La rebelión afirmó controlar buena parte de la base, mientras que la televisión pública consideró “completamente infundadas” las informaciones.
El emisario especial para Siria, Staffan de Mistura, condenó, por otro lado, la matanza de 20 drusos a manos del Frente al Nosra (brazo sirio de Al Qaida) en una aldea de la provincia de Idleb (noroeste).
“Hay que preservar el mosaico social de Siria (…) debe seguir siendo el foco de todas las comunidades (…) que vivieron en esta tierra durante miles de años”, dijo.
Los drusos, minoría musulmana heterodoxa, representan un 3% de la población siria. La comunidad está dividida entre los que apoyan al régimen y los que simpatizan con la oposición.