Los vecinos de Chillancito cambiaron los adoquines y el barro en invierno por unas modernas calles pavimentadas. La inversión asciende a los 460 millones de pesos.

Por más de cuatro décadas, los vecinos del sector Chillancito de Concepción debieron enfrentarse al barro en el invierno y a las calles polvorientas en verano.

Hoy esa realidad quedó atrás, ya que gracias a un proyecto de pavimentación participativa entre los residentes, el Serviu y el municipio cambiaron los adoquines por el cemento.

El alcalde Álvaro Ortiz resaltó la organización de los vecinos para materializar este proyecto.

La iniciativa tuvo un costo de 460 millones de pesos y beneficia a cientos de vecinos que habitan las calles Diego de Oro, Pedro Lagos, Patricio Lynch y el pasaje Perello Puig.