Dirigentes del rubro forestal, agrícola y cosechero de la Provincia de Bío Bío, miran el proceso de desaceleración económica con la esperanza de que no genere un impacto negativo en un área que es vital para la generación de mano de obra en la zona.

Tras la confirmación por parte del Ejecutivo del término de un ciclo económico a nivel nacional, el secretario del Sindicato Interempresas Forestales de Bío Bío, Cristian Muñoz, expresó que el tema es preocupante, sin embargo, confía en que los trabajadores seguirán capacitándose para mantenerse en sus puestos laborales.

Dicha agrupación representa a 17 empresas de esta provincia y, según Muñoz, la desaceleración conlleva el fin de una etapa que deben saber enfrentar para evitar el fantasma de la cesantía, que en Bío Bío alcanza al 9,9%.

Por su parte, Juan Jofré, presidente del Sindicato Número 1 de la empresa Pezoa y Gallegos, que representa a 300 trabajadores, coincidió en señalar que el futuro se debe asumir con preparación debido a las fluctuaciones económicas. Sobre todo, en un área que es fuente de trabajo para miles de personas, como el transporte forestal, las faenas agrícolas y ganaderas, además del rubro aserradero.

Representantes de diferentes empresas se reunieron este fin de semana en Los Ángeles para conocer aspectos de la desaceleración económica, y también los ejes que el Gobierno tiene para inyectar mayores recursos a objeto de generar nuevos empleos y revertir un proceso de estancamiento en el crecimiento del país.