El síndico de la Universidad del Mar reanudó el proceso de despido de los docentes, tras ser dado a conocer por el Tercer Juzgado Civil de Viña del Mar que el proceso de quiebra se reactivó. Se espera que el lunes 29 de mayo comiencen las clases en la U. de Playa Ancha, para dar continuidad de estudio a los alumnos de la institución en la región de Valparaíso.
El Tercer Juzgado Civil de Viña del Mar reanudó el proceso de quiebra de la Universidad del Mar, que había sido suspendido por una mala notificación a Mauricio Villaseñor, quien no tenía la calidad de representante legal del recinto.
Ante esto, esta semana comenzó nuevamente el trabajo del síndico de quiebra designado, Cristian Herrera, quien a su vez reanudó el proceso de despido de más de 200 docentes de la institución, quienes están situados en Viña del Mar.
La información fue confirmada por Alejandro Vásquez, docente coordinador de asuntos estudiantiles de la cuestionada casa de estudios, quien ratificó que se extenderá la vigencia de la institución hasta 2016, con el fin de que los estudiantes puedan terminar sus estudios.
Vásquez agregó que esto era esperable por los profesores debido al proceso. Sin embargo, indicó se hubiese preferido otra gestión que se enmarca en torno a la Comisión de Educación, en la cual se planteó que podría existir un interventor provisional para el proceso de cierre, lo que no se ejecutó.
Respecto al área administrativa, Vásquez dijo que lo que se conoce es que cada una de las sedes a nivel nacional seguirá funcionando con el mínimo de personal para abaratar los costos de operación, acción que se replica en Recreo y que se hará formal luego de la nómina que será entregada por el síndico de quiebra.
En tanto, en lo referente a la continuidad de estudios de los alumnos y al convenio con la Universidad de Playa Ancha, Raúl Soto, vocero de la asamblea de estudiantes de la sede en Viña del Mar, dijo que se espera que este lunes 29 de mayo comiencen las clases, quedando sólo en espera los casos excepcionales.
Si bien este proceso se tiene que generar para asegurar la continuidad de estudios de los alumnos, no es validado 100% por ellos, puesto que el desprestigio de la institución por cuestionamientos financieros, administrativos y judiciales es según los mismos estudiantes, lo más complejo para ingresar al campo laboral.