El gobierno de Bolivia acusó este lunes a la oposición de recibir órdenes de Estados Unidos para aliarse y presentar un candidato único en las elecciones generales de octubre, en las que el presidente Evo Morales buscará un tercer su mandato.

El ministro del Interior, Carlos Romero, afirmó que Estados Unidos promueve la candidatura única por intermedio del ex ministro boliviano Carlos Sánchez Berzaín, radicado en ese país desde 2003 tras la dimisión del liberal Gonzalo Sánchez de Lozada, quien huyó durante una rebelión popular saldada con más de 60 muertos y ahora es pedido en extradición.

Romero involucró en ese supuesto plan al empresario Samuel Doria Medina (líder de Unidad Nacional, centroderecha), al gobernador de Santa Cruz, Rubén Costas (derecha) y a Juan del Granado, jefe del Movimiento Sin Miedo (MSM, socialdemocracia), los mejores favorecidos en la intención de voto.

“Estos tres políticos que reciben órdenes de Sánchez Berzaín, reciben instrucciones de los Estados Unidos (..) promueven candidaturas con fines electorales, sin base de propuestas”, señaló Romero.

Sánchez Berzaín negó desde Estados Unidos estar detrás de los esfuerzos por unificar la oposición en Bolivia. “Es una maniobra política para mantener dividida a la oposición”, señaló en comunicación con radio Fides de La Paz.

Los esfuerzos por la unidad de la oposición responden “a unos mandatos que se están recibiendo desde el Norte, de Estados Unidos, cuyo operador y jefe articulador y de campaña de la oposición en Bolivia se llama Carlos Sánchez Berzaín”, insistió Romero.

Según diversos analistas independientes sólo la unidad de la oposición podría enfrentar a Morales, cuya reelección parece segura.

A pesar de una caída a 38,3% de su popularidad en abril, el izquierdista Morales sería reelegido en primera vuelta con una importante ventaja de 24 puntos sobre el candidato que lo sigue, el empresario Doria Medina, que recoge el 14% de las preferencias de acuerdo a la encuesta publicada en diarios locales.

Costas alcanzaría el 9,3% de los votos, mientras que Del Granado, el 5,9%, según el sondeo.

La Constitución boliviana dice que, aunque un candidato no logre la mayoría absoluta en las elecciones, puede acceder directamente a la Presidencia si obtiene 10 puntos de diferencia sobre el segundo.

Morales aspira a conseguir un tercer mandato en los comicios de octubre para el periodo 2015-2020. Sus primeras elecciones las ganó en 2006 con el 54% de los votos y las segundas en 2010 con el 64% tras la aprobación de una nueva carta magna.