Una enfermedad infecciosa rara e incurable, parecida a la poliomielitis, afecta a un pequeño grupo de niños en California, oeste de Estados Unidos, anunciaron investigadores de la Universidad de Stanford.

Cinco casos de parálisis súbita en niños fueron descriptos el domingo por estos expertos durante un congreso de la Academia Estadounidense de Neurología (AAN, por sus siglas en inglés) en Filadelfia (Pensilvania).

“Aunque el virus de la poliomielitis ha sido prácticamente erradicado en el mundo, otros virus también pueden dañar la médula espinal, provocando un síndrome similar a la polio”, dijo el neurólogo de Stanford, Keith Van Haren, autor principal de este estudio.

“En la última década, nuevas formas identificadas de enterovirus han sido relacionadas con la aparición de brotes de poliomielitis en niños en Asia y Australia”, señaló el experto en un comunicado.

“Estos cinco nuevos casos dejan en evidencia la posibilidad de un síndrome similar a la poliomielitis infecciosa emergente en California”.

La poliomielitis ha sido erradicada en gran parte del mundo gracias a la introducción de una vacuna en la década de 1950, pero la enfermedad sigue causando estragos en algunos países como Pakistán, Nigeria y Afganistán.

En California, los cinco niños afectados por el nuevo síndrome habían sido vacunados contra la poliomielitis, y los exámenes para detectar esta enfermedad dieron negativo. Todos presentaron los mismos síntomas: pérdida súbita de movimiento en uno de sus miembros seguida de una parálisis a los dos días.

Tres de los niños padecían una enfermedad respiratoria antes de la aparición de estos síntomas.

Dos de ellos eran portadores del Enterovirus 68, un virus raro que se ha asociado con la aparición de la enfermedad, en tanto los otros tres no eran portadores, y los médicos siguen investigando las causas de su parálisis.

“Queremos hacer hincapié en que este síndrome es muy, muy raro”, insistió Van Haren, aunque los científicos creen que pueden aparecer otros casos.

Los expertos llamaron a comunicar a los médicos lo antes posible cualquier signo de parálisis en niños.